Acusan a petrolera de provocar terremotos y destruir las casas de campesinos

Mimoza Dhima

Zharrez (Albania), 24 jun.- Abandonados por el Estado, unos 8.000 habitantes de seis pueblos en el sur de Albania han visto aumentar los temblores de tierra y las grietas de sus casas desde que una petrolera canadiense comenzó a operar en la zona, por lo que acusan a la empresa de provocar terremotos.

A su lucha diaria por la supervivencia, en los últimos días se han sumado para estos campesinos serios daños de sus casas, provocados por seísmos, según las autoridades albanesas, mientras que los habitantes de la zona responsabilizan a la petrolera canadiense "Bankers Petroleum" que gestiona uno de los mayores yacimientos de crudo y gas en tierra europea.

Los temblores de tierra, frecuentes desde 2008, cuatro años después de la llegada de los canadienses, causaron el domingo pasado grietas en las paredes de decenas de viviendas en Zharrez, el pueblo más afectado por este fenómeno de la zona petrolera de Patos Marinza, situada a unos 150 kilómetros al sur de la capital albanesa.

"Estaba durmiendo cuando sentí una sacudida seguida de otra más fuerte a las cuatro de la madrugada del domingo. Aterrorizada salí corriendo a la calle", dijo a Efe Fetije Hajdini, una campesina.

"Un día nos caerán las casas encima. Hemos pedido ayuda y nadie nos hace caso. Los políticos vienen solo cuando piden votos. Estamos muertos para ellos", se lamentó su marido, Tajar.

Como para la mayoría de los habitantes del pueblo, para Shpresa y Nusret Nuraj es imposible reparar las paredes agrietadas de su modesta casa ya que viven únicamente de una pensión de invalidez de 6.000 lek (unos 43 euros) mensuales del marido, y la venta de la leche de su única vaca.

"No sé que está pasando. He enviado decenas de cartas a las instituciones responsables y su respuesta es que son terremotos. Pero no me atrevo a decir eso a los campesinos, porque me enemistaría con todos", dijo a Efe Taulant Grembi, alcalde de la aldea.

Todos en el pueblo responsabilizan de los daños a los canadienses que, para extraer el petróleo, provocan explosiones introduciendo aguas residuales a presión en el subsuelo.

Esto se hace para explotar al máximo el pozo en un breve tiempo, explicó Tajar Malaj, especialista petrolero.

Al aplicar este método se arriesga la creación de grandes huecos en la profundidad de la tierra que podrían provocar el hundimiento del pueblo entero, añadió.

"¿Cómo explicas tú que todas las sacudidas de la tierra fueran verticales y ocurrieran por la noche?", preguntó Shpresa.

Irritados, los campesinos asaltaron el domingo pasado diez de los depósitos de Bankers y derramaron cientos de toneladas del crudo.

La policía arrestó a dos de ellos, acusados de "destrucción de la propiedad" y "participación en protestas ilegales", mientras que la fiscalía ha abierto una investigación para aclarar el fenómeno.

Bankers, con sede en Calgari (Canadá), ha calificado en un comunicado de "desafortunado" el incidente, y rechazó que recurra a explosiones subterráneas que podrían provocar terremotos.

A su favor están los sismólogos que afirman que esta es una zona sísmica y que el 17 de junio se registraron aquí dos terremotos de una magnitud de 3,4 grados en la escala de Richter, si bien tuvieron lugar en horarios diferentes de los que confirmaron los campesinos.

"Fue la primera vez que se pasó a un acto de vandalismo contra nuestra empresa. Si hubiera explotado el gas que estaba en los depósitos, las consecuencias habrían sido catastróficas", declaró a Efe Omer Dashi, gerente de comunicación de Bankers.

Esta empresa es la mayor productora petrolera de Albania, y desde que en 2004 obtuvo la concesión para explotar unos 600 pozos de este yacimiento en 25 años, ha elevado el nivel de su extracción hasta lo 15.000 barriles diarios, desde los 600 barriles al día que bombeaba el primer año (2004).

Es un petróleo pesado, que se extrae a unos 1.500 metros de profundidad mediante la técnica de perforación rotatoria, y se exporta totalmente al extranjero.