A horcajadas de la tendencia alcista que viene apuntando desde hace casi dos meses, la acción de Aedas Homes cotizaba este martes en bolsa en las inmediaciones de los 21,45 euros, lo que teniendo en cuenta los casi 48 millones de acciones que tiene en el mercado dan como resultado una capitalización bursátil de 1.028 millones de euros. Esa cifra sitúa a la promotora inmobiliaria dentro del radio de acción del nuevo Impuesto a las Transacciones Financieras creado por el Ministerio de Hacienda, que gravará a partir del próximo 16 de enero con un tipo del 0,2% las transacciones con títulos de empresas cuya cotización bursátil supere los 1.000 millones de euros. Sin embargo, las transacciones con títulos de Aedas Homes que se efectúen durante 2021 se librarán de esta 'penalización' fiscal.
El motivo es que la ley que sostiene el nuevo impuesto establece que la referencia para determinar ese umbral de 1.000 millones de capitalización se tome un mes antes de la entrada en vigor del mismo, es decir, el 16 de diciembre, y ese día la acción de Aedas Homes cotizaba a 20,70 euros y por tanto la capitalización bursátil que se tuvo en cuenta fue la de 987 millones de euros que acreditaba esa jornada. Apenas hubo que esperar seis días para que Aedas estuviera ya dentro del umbral que obliga a los inversores a pagar una tipo fiscal del 0,2% por la operativa con los títulos de la compañía, pero ese pequeño lapso temporal librará a la entidad dirigida por David Martínez de la penalización fiscal de la Tasa Tobin.
El de Aedas es quizá el caso más extremo, pero no el único. Un puñado de compañías cotizadas ilustres ha conseguido esquivar por los pelos el peaje fiscal que el Gobierno ha decidido instaurar sobre las compraventas de títulos de las empresas españolas más capitalizadas del mercado. Y lo ha hecho, bien como consecuencia de la pérdida generalizada de valor bursátil que han experimentado las acciones de las compañías durante la pandemia, bien porque la fecha de corte establecida en la ley ha impedido que la fuerte recuperación que se empieza a vislumbrar en sectores como las energías renovables o parte del inmobiliario las sitúe junto al resto de 56 sociedades cotizadas cuyos títulos sí tendrán que pagan el nuevo impuesto financiero.
En ese listado de 'afortunados' a los que no se aplicará el impuesto está, por ejemplo, el Grupo Prisa, que hasta el pasado 19 de febrero acreditaba una capitalización bursátil por encima de los 1.000 millones de euros pero que desde entonces ha experimentado un deterioro muy significativo del que apenas ha empezado a recuperarse y cuya única ventaja sea muy probablemente el hecho de que sus títulos no van a llevar la carga fiscal extra asociada a la Tasa Tobin. En una situación muy similar está la energética catalana, Audax Renovables, cuya capitalización se movía holgadamente por encima de los 1.000 millones de euros hasta que sobrevino la pandemia y el valor de la acción se desplomó.
Los efectos de la pandemia sobre los mercados de capital también ha permitido que otras compañías como Elecnor o Neinor Homes esquiven la penalización fiscal sobre las adquisiciones de sus títulos. Ambas presentaban a principios de año cifras de capitalización bursátil muy próximas a los 1.000 millones de euros, que las situaban como serias candidatas a formar parte del listado de empresas afectadas por la 'Tasa Tobin', pero la crisis sanitaria las alejó de ese umbral al que ahora vuelven a aproximarse de nuevo. El establecimiento del punto de corte el pasado 16 de diciembre ha sido lo que muy probablemente las haya librado de esa penalización.
Caso aparte es el de Grenergy, la joven compañía productora de energía a partir de fuentes renovables, que hace apenas un año daba el salto desde el MAB al Mercado Continuo y que doce meses después presume de que sus acciones se hayan revalorizado un 55% en medio de un contexto de pandemia, pero también de un renacido furor por las acciones de las empresas de energías renovables, muy probablemente al calor de los fondos europeos para la reconstrucción económica. Su capitalización se sitúa en el entorno de los 850 millones de euros, pero la tendencia apunta a que superará los 1.000 millones más pronto que tarde.
La liquidación del nuevo impuesto sobre las transacciones financieras comenzará el próximo 22 de febrero y se llevará a cabo de manera mensual en torno al día 20 de cada mes, según el calendario del contribuyente de 2021 publicado por la Agencia Tributaria, informa Europa Press. De esta forma, el día 22 de febrero se liquidará el impuesto correspondiente a enero y así sucesivamente todos los meses del año hasta finalizar el ejercicio. El Gobierno prevé recaudar con la conocida como 'tasa Tobin' 850 millones de euros anuales, al gravar con un 0,2% las operaciones de adquisición de acciones emitidas en España por empresas cotizadas cuya capitalización bursátil sea superior a 1.000 millones de euros. No se gravará la compra de acciones de pymes y empresas no cotizadas.
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