Vía libre a la ampliación de Atocha para acoger todos los trenes de alta velocidad

Hay pocos debates que antes de nacer tengan fecha de caducidad. Uno de ellos es la polémica sobre el cambio de cabecera de los trenes AVE de Renfe que circulan entre Murcia, Alicante, Valencia y Madrid, que ahora ya no parten desde Atocha, sino desde Chamartín. Y desde ahí seguirán partiendo en el futuro porque así está acordado desde hace varios años, pero también volverán a Atocha, porque Adif ha arrancado el proceso para que todos los trenes que circulan por el túnel de alta velocidad que atraviesa la capital puedan parar en sus dos grandes estaciones.

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias acaba de sacar el concurso público para ampliar la estación de Madrid-Puerta de Atocha con dos nuevas vías y un andén para que posteriormente pueda arrancar la construcción de la futura estación pasante. Esta primera obra, valorada en 58,8 millones de euros (con IVA), supone el comienzo oficial de la segunda remodelación de la estación madrileña, que permitirá reconfigurar la oferta de trenes rápidos en España para que puedan hacer parada en las dos estaciones que dan servicio al norte, centro y sur de la capital. 

Las obras se extenderán más de dos años (26 meses) desde que se formalice el contrato e incluyen la ejecución de nuevas estructuras, ampliación de las pérgolas existentes, nuevos cerramientos, un nuevo edificio destinado a los servicios de catering, la disposición de una sala provisional para autoridades, una plataforma de conexión con la terminal de Cercanías, nuevos accesos y viales de servicio. Las empresas interesadas pueden postular hasta el 8 de marzo. 

Para que pueda construirse la estación pasante, Adif necesita liberar espacio en superficie, y lo hará moviendo dos de las actuales vías de 400 metros al otro extremo de la estación. En el espacio liberado arrancarán las obras para esta nueva estación subterránea que dispondrá de cuatro vías y dos andenes, cuyo proyecto está en fase de redacción. 

La estación pasante, pieza clave de la red de alta velocidad

Situada bajo la calle Méndez Álvaro, dará servicio a todos los trenes que tanto hoy como en un futuro circularán por el tercer "túnel de la risa", que tras su apertura en 2022 permitió conectar las líneas de alta velocidad del norte de España con las del sur. Este túnel supuso una inversión de 338 millones de euros y atraviesa Madrid bajo la calle Serrano, a unos 45 metros de profundidad. Para conectarlo con las líneas de alta velocidad de Levante y Andalucía, se habilitó un túnel provisional que permitiera su uso antes de que se ponga en marcha la mencionada terminal pasante.

Este túnel permite que los trenes puedan circular hoy entre Valencia y Asturias, por ejemplo, sin tener que cambiar de ancho de vía. La futura estación pasante hará que además de parar en Chamartín también pueda hacerlo en Atocha. Para que la veamos en funcionamiento no hay plazos fijados, aunque Raquel Sánchez, ministra de Transportes, aseguró el año pasado que podría estar lista antes de 2028. A día de hoy, la obra está en fase de información pública para atender las expropiaciones necesarias. 

Esta ampliación coincidirá en el tiempo con el anuncio de remodelación de la marquesina histórica y el edificio de servicios de la estación de Atocha, obras que Adif ya comenzó hace unas semanas. Tras la estación pasante se construirá un nuevo vestíbulo sur que conectará las terminales de alta velocidad y Cercanías, y se rematará la estación con nuevos viales y un aparcamiento en altura, aunque todas estas actuaciones no tienen fecha y serán abordadas en un futuro por definir.