Aprobado, con los votos del PSOE, el rechazo de las Cortes al ATC en toda Castilla-La Mancha

Toledo.- Las Cortes de Castilla-La Mancha han aprobado, sólo con los votos del PSOE y la oposición del PP, una propuesta de resolución en la que muestran su oposición a la instalación de un almacén de residuos nucleares en cualquier municipio o provincia de la comunidad autónoma.

Se trata de una propuesta basada en unas declaraciones realizadas el 19 de enero por la presidenta regional del PP, María Dolores de Cospedal, en las que manifestó: "El PP de Castilla-La Mancha considera que no debe instalarse ningún almacén nuclear temporal o no, o cementerio, como lo quiera ustedes llamar, en Castilla-La Mancha, en ninguno de sus municipios".

El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, ha intervenido por cuarta vez en el debate segundos antes de la votación para manifestar que, al tratarse de unas palabras de Cospedal, pensaba que era "un denominador común" en el que todos podían coincidir.

Por contra, ha lamentado, la propuesta de resolución del PP era una "sucesión de reproches muy difícil de asumir".

Dicha propuesta, de cuatro folios y que ha sido rechazada por la mayoría socialista, también contenía un rechazo a las tres candidaturas presentadas por Yebra (Guadalajara), Villar de Cañas (Cuenca) y Villar del Pozo (Ciudad Real).

En su propuesta, el PP pretendía que las Cortes regionales instaran al Gobierno de España a determinar la ubicación del ATC "cumpliendo los requisitos de la normativa vigente", entre los que cita "el consenso político y social".

Por ese motivo, subrayaba: "en el momento actual, no concurren estos requisitos en ninguna de las tres provincias correspondientes a los municipios que han presentado candidaturas para ser sede del futuro Almacén Temporal Centralizado".

El portavoz socialista, Santiago Moreno, ha ofrecido al PP apoyar esa parte de su propuesta, pero no "las falsedades y juicios de valor", que, a su juicio, contiene el resto de la resolución del principal partido de la oposición.

La iniciativa del PP responsabilizaba al Gobierno central de la situación "por la falta de definición de una política clara" y criticaban las "contradicciones, la falta de coherencia y el oportunismo político" del PSOE y de los gobiernos de España y de Castilla-La Mancha.

Como muestra de ese "oportunismo", el PP planteaba que en 1999 el grupo socialista en las Cortes regionales rechazó celebrar un debate sobre este mismo asunto por no ser competencia del Parlamento regional.

También acusaba a los diputados y senadores socialistas por Castilla-La Mancha que, desde 2004 hasta ahora, no hayan presentado ninguna iniciativa para impedir el ATC en la comunidad autónoma.