España vive una de las peores crisis económicas que se recuerda, como consecuencia de la Covid-19. Un panorama que ha hecho que, prácticamente, todo el sector bancario se viese obligado a provisionar parte de sus cuentas para hacer frente a la recesión. Durante la primera ola, además, las entidades reaccionaron de forma óptima a las circunstancias: adelantaron el ingreso de las pensiones o el paro, establecieron moratorias en el pago de créditos o permitieron la retirada de efectivo gratis en cualquier cajero (fueras o no cliente). Sin embargo, si hay algo que no ha frenado a los bancos en el último año ha sido endurecer su política de comisiones, que afecta de lleno al cliente.
Y es que los bancos buscan cada vez más rentabilidad en un mercado donde los tipos de interés siguen manteniéndose al 0%, el ahorro de las familias está tocando máximos históricos y los créditos hipotecarios se encuentran, casi, en punto muerto. Así, una de las vías de las entidades está siendo fidelizar aún más a sus clientes, de forma que los que tengan menos vinculación (sin ingresos mensuales, nóminas domiciliadas, etc.) tengan que pagar un extra por el mantenimiento de las cuentas. En los últimos doce meses, son varias las compañías que han optado por incrementar las comisiones bancarias. ¿Cuáles han sido?
ING: 120 euros al año
El último en seguir esta estrategia ha sido ING y éste en particular no es baladí, pues hablamos de un cambio importante en la estrategia comercial de la entidad. En concreto, su nueva política atañe a la Cuenta Naranja: sus clientes empezarán a pagar una comisión de 10 euros mensuales, lo que supone 120 euros al año. Eso sí, el porcentaje de afectados es pequeño, alrededor de un 4% (en bruto, unos 171.000 clientes).
La idea del banco naranja, según trasladó la semana pasada su portavoz, es que la Cuenta Naranja, que ofrece una rentabilidad del 0,01% TAE, pase a ser un beneficio más de la Cuenta Nómina y no ya un producto que se pueda contratar de forma separada. ¿La forma de evitar esta nueva comisión? Cumpliendo, al menos uno, de los siguientes requisitos
- Domiciliar la nómina
- Que los ingresos mensuales sean de unos 700 euros como mínimo
- Que los ahorros depositados sean menos de 30.000 euros
Caixabank: 240 euros al año
La 'nueva comisión' de Caixabank ha empezado a cobrarse a partir de octubre. Lo cierto es que la entidad avisó a principios de año del cambio de condiciones que estaba previsto para abril, pero la emergencia sanitaria aplazó la puesta en marcha hasta ahora.
La comisión de mantenimiento ha ascendido hasta los 240 euros anuales: 60 euros al trimestre. Esta sustituirá al pago habitual de 12 euros mensuales que se cobraba a principios de mes.
¿Cómo evitarla? Los clientes que domicilien una nómina de más de 600 euros mensuales, una pensión superior a 300 o mantengan un saldo de más de 20.000 euros en productos de inversión pagarán una cuota trimestral de 15 euros en lugar de 60. Si además de cumplir uno de los requisitos anteriores, domicilian tres recibos o realizan al menos tres compras con tarjeta de crédito al trimestre, la cuota será gratuita.
Aquellos clientes que cumplan los requisitos anteriores no solo no pagarán comisiones por el mantenimiento de su cuenta, sino tampoco por los servicios básicos: emisión de transferencias SEPA, negociación y compensación de cheques en euros, solicitud de certificados por Internet y emisión y renovación de las tarjetas de crédito. Eso sí, los clientes que quieran una tarjeta de débito tendrán que pagar 36 euros anuales aparte.
Banco Santander: 240 euros al año
En las últimas semanas, el Banco Santander ha eliminado su mítica cuenta 1,2,3, que ha sido sustituida por Santander One. Además de distinto nombre, el cambio también ha supuesto una modificación en las condiciones que, en parte, se han traducido en un incremento en las comisiones de mantenimiento. En cifras: el cobro será de 20 euros mensuales o, lo que es lo mismo, 240 euros al año. Para ahorrarse este dinero los clientes necesitarán:
- Tener la nómina o pensión domiciliada
- Pagar en la cuenta tres recibos al trimestre
- Tener contratado un préstamo, un fondo, un seguro, etc.
Si no se cumple ninguno de los requisitos anteriores es cuando el mantenimiento de la cuenta asciende hasta los 240 euros. Si solo se tiene ingresos domiciliados o solo se cuenta con un producto de inversión, se pagarán 120 euros al año (10 mensuales). En caso de cumplir todas las condiciones, no habrá que hacer frente a ningún extra.
Banco Sabadell: 60 euros al año
Banco Sabadell (que, por cierto, ha sido noticia en las últimas horas por su fusión con el BBVA) ha sido otro de los que cambió las condiciones durante el primer semestre del año. Lo hizo en una de las cuentas más comunes de la entidad: la Cuenta Expansión. Anteriormente, para el mantenimiento gratuito de ésta solo se precisaba una nómina o ingresos superiores a 700 euros. Ahora, a los requisitos anteriores, se exigen los siguientes:
- Tener contratado un seguro con el Sabadell
- Un préstamo
- Tener, al menos, 10.000 euros invertidos en fondos de inversión gestionados por Sabadell.
En caso de no cumplirse, el banco cobrará una comisión de mantenimiento de 5 euros mensuales, lo que supone 60 euros al año.
Bankia: 196 euros al año
A finales del pasado febrero, el programa 'Por ser Tú' cambió sus condiciones que afectaban a contratos y tarjetas básicas. Esto se tradujo en comisiones de hasta 72 euros al año por el mantenimiento de la cuenta bancaria, con nómina domiciliada. Si esto último no se diese, la cifra aumenta a 168 euros anuales con 28 euros adicionales si se quiere utilizar la tarjeta de débito.
Para no pagar comisiones, es necesario tener un saldo a final de mes en recursos de un valor mínimo de 40.000 euros o domiciliar una nómina de 700 euros, prestación por desempleo de 400 euros o pensión de 250 euros. O, también, cumplir un solo requisito adicional de:
- Efectuar dos compras mensuales con la tarjeta de crédito
- Disponer de primas de seguro de riesgo por valor de 135 euros
- Tener un saldo a final de mes en recursos de un valor mínimo de 30.000 euros.
BBVA: 100 euros al año
En los últimos meses, BBVA también ha endurecido sus condiciones de mantenimiento, que entrarán en vigor el próximo 15 de diciembre. Se tendrá que pagar 100 euros al año si no se cumplen los siguientes requisitos.
Para los titulares mayores de 29 años, el importe de la nómina o ingresos domiciliados pasa a 800 euros, desde los 600 que antes se exigían. Además, tendrán que tener domiciliados el pago de cinco recibos o realizar al menos siete movimientos con las tarjetas de crédito, ya que las de débito dejarán de computar para obtener estos beneficios.
Asimismo, a los clientes con edades comprendidas entre los 21 y 29 años se les exigirá realizar siete compras en cuatro meses con tarjeta de crédito para evitar comisiones. Esto a menos que tengan la 'cuenta joven' que no tiene tarifas adicionales. Los menores de 21 años continuarán exentos de pagar cualquier cargo
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