La Comisión Europea propuso este miércoles que en 2021 se desembolsen 344.000 millones de euros del futuro fondo de recuperación de la Unión Europea, casi un 46 % del total de 750.000 millones con que contaría hasta 2024 para relanzar la economía del continente tras la pandemia. En concreto, 211.000 millones de euros se desembolsarían en forma de subvenciones a fondo perdido para los Estados, mientras que 133.000 millones llegarían en forma de préstamos, según el plan presupuestario presentado este miércoles por el Ejecutivo comunitario para el año que viene.
Según el mismo, el presupuesto comunitario de 2021 ascendería a 166.700 millones de euros en compromisos (el montante máximo que puede prometer la UE) y a 163.500 millones en pagos -el dinero que desembolsará efectivamente en 2021-, mientras que el presupuesto de 2020 contó con 168.690 millones y 153.570 millones, respectivamente. Estas cifras dependen, sin embargo, de que los 27 Estados miembros den el visto bueno al plan de recuperación post-pandemia planteado por Bruselas, que prevé complementar el citado fondo de recuperación con un presupuesto comunitario de 1,1 billones de euros para todo el periodo 2021-2027.
Los jefes de Estado y de Gobierno celebrarán el 17 y 18 de julio una cumbre en Bruselas con el objetivo de dejar cerrado un acuerdo que la mayoría considera urgente, pero sobre el que están divididos.
El plan de Bruselas ya preveía que la mayor parte del fondo de recuperación, bautizado como "Next Generation EU" (Próxima Generación UE), se desembolsase en sus primeros años de funcionamiento para impulsar la recuperación lo antes posible, aunque hasta ahora no había concretado cifras.
De los 211.000 millones de euros en subvenciones que llegarían a los países en 2021, la mayor parte (131.580 millones) serían para financiar planes de reformas e inversiones, mientras que 42.440 millones serían ayudas adicionales de cohesión, 17.920 millones a empresas y 11.350 millones para programas de ciencia, salud o ayuda humanitaria, entre otras partidas. Los 133.000 millones de euros en préstamos se destinarán a costear planes de reformas e inversión, aunque su asignación dependerá de las solicitudes que presenten los Estados.
En cuanto al presupuesto para 2021, la principal partida, con 58.440 millones de euros será la de Recursos Naturales y Medioambiente, de la que 55.200 millones serán para ayudas de la Política Agraria Común (PAC) y 813 millones para el Fondo Marítimo y de Pesca. Esto supone un descenso con respecto a 2020, cuando la partida general contó con 59.907 millones, de los cuales, 58.120 millones para la PAC.
Las ayudas de cohesión, por su parte, descenderían a 47.150 millones de euros, frente a los 58.646 millones de 2020, aunque se complementarían con la aportación del fondo de recuperación. En total, las ayudas agrícolas y de cohesión, las partidas tradicionalmente más importantes, siguen copando un 61% del presupuesto comunitario, aunque su peso ha ido cayendo en los últimos ejercicios (en 2020 fueron el 65% del total) en detrimento de nuevas prioridades europeas.
Así el presupuesto para 2021 destinaría 1.340 millones al programa Digital Europe de digitalización y ciberdefensa, 1.100 millones para el Fondo de Asilo y Migración y 1.000 millones para la gestión de fronteras exteriores. Otros 3.000 millones de euros se destinarían al programa Connecting Europe de infraestructuras de transporte y 2.890 millones al programa de intercambio educativo Erasmus Plus, entre otras partidas.
Con la presentación de esta propuesta comenzará la negociación de las cuentas con el Parlamento Europeo y los Estados, que debe concluir en noviembre. La Comisión enmendará esta propuesta una vez haya un acuerdo definitivo sobre el plan de recuperación.
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