Caja Segovia rechaza por mayoría su integración en Banca Cívica

Los consejos de administración de las cajas de ahorros de Segovia y Ávila han rechazado por mayoría integrarse en el proyecto de Banca Cívica. Según ha declarado el presidente de la entidad segoviana, Atilano Soto, a la agencia Efe, el motivo de su rechazo han sido algunos aspectos vinculados con el orden territorial y la cuota de interés que los consejeros no han considerado beneficiosa para la entidad, a pesar de llevar negociando durante más de dos meses.

La votación de Caja Segovia se ha saldado con doce votos en contra del informe, de los diecisiete del máximo órgano de administración, mientras que en Caja Ávila catorce miembros han rechazado la integración, mientras que tres se han pronunciado a favor. Tras estas renuncias, el Grupo Banca Cívica está formado por Caja Navarra, Caja de Burgos y caja Canarias.

Aunque ha mantenido la incógnita, el presidente de Caja Segovia ha adelantado que va a negociar otras operación con dos o tres grupos de entidades que trabajan en proyectos vinculados al Sistema Institucional de Protección (SIP) o "fusión fría".

Agustín González, presidente de Caja Ávila, ha señalado que el Consejo "ha pensado que el traje confeccionado se quedaba muy estrecho" y que hay que buscar "otro sastre" que les haga sentirse "más cómodos", pues a su juicio, "no se ha dado a Caja de Ávila lo que pesa y Ávila tiene un gran peso que no se ha sabido reconocer".

"Cuando en un documento se dice únicamente que a Caja de Ávila se le va a dar el peso que salga hay que preguntar qué factores van a aplicarse a la fórmula matemática, la eficiencia, los activos y pasivos, la eficacia, la solvencia y la liquidez", ha indicado González, quien ha añadido que "a los demás -en referencia a Caja Navarra, Caja de Burgos y Caja Canarias- no se les ha hecho ninguna valoración y Caja de Ávila necesita conocer los factores aplicables".

"Por lo menos debían decirnos la realidad matemática para conocer el coeficiente de participación", ha subrayado el presidente de la entidad abulense, quien ha señalado que "ahora habrá que buscar un sastre que garantice que el traje está hecho a medida y es cómodo".

Agustín González ha descartado una intervención del Banco de España, que "ya está informado y ve bien lo que los consejos decidan, pues sólo tiene el interés de fortalecer el sistema bancario y cualquier otro proyecto en esa línea será bueno".

También ha indicado que la Junta de Castilla y León "debe entender" que esta decisión de hoy "es fruto de la independencia de los consejos y más cuando se ha partido de una premisa ilusionante", pues como ha señalado "hubiese sido más cómodo decir que había un final feliz".

Por su parte, el presidente de Caja Segovia ha dicho: "Siempre hay un sabor agridulce, después de un intento de aproximación con la mejor voluntad, a un grupo que tiene bondades, pero terminas diciendo que no a algo con lo que te habías ilusionado".

Además de criticar que se haya impuesto "la presión del tiempo", Soto ha subrayado, como conclusión, que la propuesta "no cumple el valor y el peso que tiene Caja Segovia".