CEOE pide limitar el SMI

Calviño insiste en alcanzar el pacto de rentas pese a la moderación del empleo

El Gobierno es consciente de las dificultades para lograr el acuerdo pero sigue adelante con su voluntad. En septiembre, iniciará el proceso para lograr que los salarios y los beneficios suban de forma limitada.

Nadia Calviño
La vicepresidenta de Asuntos Económicos, Nadia Calviño.
Eduardo Parra / Europa Press 

Será complicado pero no por ello el Gobierno dejará de intentarlo. En septiembre, el Ejecutivo retomará las conversaciones para impulsar un pacto de rentas que el Ministerio de Asuntos Económicos desvincula del freno en la creación de empleo que han desvelado los datos correspondientes al mes de julio. La vicepresidenta de Asuntos Económicos insiste en la fortaleza del mercado laboral y subraya el cambio de tendencia en la contratación que ha impulsado la reforma laboral, con el crecimiento de los contratos indefinidos. Por este motivo, lejos de suponer un freno a la consecución del pacto de rentas, desde Asuntos Económicos defienden que es necesario "impulsar a los agentes sociales para tener estabilidad y perspectiva de moderación de salarios y beneficios y márgenes empresariales".

Calviño se distancia del secretario de Estado de Empleo que admitió este martes que los datos de paro de julio suponen "un toque de atención" y justifica que "la volatilidad en un mes concreto no nos tiene que despistar de las grandes cifras". Pero está claro que las cifras del séptimo mes del año marcan un cambio de tendencia que ha ayudado a Moncloa a mantener el optimismo económico estos meses. Con el aumento del paro y la destrucción de puestos de trabajo -medido por la afiliación a la Seguridad Social-, el mercado laboral da muestras de agotamiento tras los crecimientos más abultados de los últimos meses, tras la entrada en vigor de la reforma laboral.

El Ministerio de Trabajo ha apuntado a la incertidumbre internacional para justificar estos datos que, según Asuntos Económicos, explican la voluntad del Gobierno de alcanzar un pacto de rentas. Sin embargo, no será tarea fácil. La CEOE puso como condición para acordar una limitación salarial que el Gobierno diera ejemplo y se incluyese a los funcionarios y a los pensionistas en la moderación de las remuneraciones. Ahora, tras conocer la evolución de la contratación en el mes de julio, los empresarios instan a "moderar el coste laboral, incluyendo el salario mínimo interprofesional". Además, tal como publicó este periódico, en otoño se celebrarán elecciones en la patronal y el actual presidente, Antonio Garamendi, buscará su reelección. Con este escenario, fuentes gubernamentales ven "complicadísimo" alcanzar el pacto de rentas.

De hecho, fuentes de Asuntos Económicos matizan que "en otoño se va a impulsar el pacto, a ver si se consigue", dando por hecho que no es un reto fácil. Desde UGT se han mostrado a favor del pacto de rentas, tras conocerse los datos de paro. Aunque lo han hecho sin mencionar este acuerdo, sí se han referido a la necesidad  de "actuar protegiendo la capacidad adquisitiva de las familias, con políticas más ambiciosas que contengan el aumento descontrolado de los precios y limiten los grandes beneficios extraordinarios acumulados por las grandes empresas, especialmente aquellas energéticas que se aprovechan de la actual situación".

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha abierto la puerta a incluir a los funcionarios en un eventual pacto de rentas, pero primero, el Ejecutivo espera el acuerdo entre sindicatos y empresarios. De hecho, Montero no negociará la revalorización salarial de los empleados públicos hasta septiembre, fecha para la cual ya han anunciado protestas las organizaciones sindicales. Csif ha adelantado que prepara "una gran movilización en Madrid" y ha manifestado su rechazo al pacto de rentas. El sindicato, que representa principalmente a trabajadores del sector público, ha exigido "al Gobierno que dé ejemplo a la empresa privada y plantee ya una subida en las administraciones, como acaba de proponer el Ejecutivo en Francia".

Desde CCOO se han mostrado favorables al acuerdo entre empresas y empleados pero piden al Gobierno mayor implicación. El secretario general de la organización, Unai Sordo, afirmó recientemente que "la gran incógnita es qué pone el Gobierno encima de la mesa, porque sigue dando la impresión de que lo ve como una cuestión ajena y es el principal protagonista en ese pacto de rentas". Sordo insistió en que el Ejecutivo "podría ayudar mucho a avanzar en un acuerdo salarial si dijera que si a finales de año no hay un acuerdo (...) tirará para adelante en los próximos Presupuestos Generales del Estado con un tipo mínimo efectivo en el Impuesto de Sociedades del 15% o el 20%".

Tras aprobar un plan de ahorro energético y prorrogar las ayudas para el sector del transporte, el Gobierno se marcha de vacaciones con una larga lista de tareas económicas de cara a septiembre. Además del pacto de rentas, la negociación presupuestaria cobrará protagonismo después de agosto. Función Pública deberá iniciar las negociaciones sobre la revalorización salarial de los empleados públicos. Por su parte, el Ministerio de Trabajo reunirá a los expertos para volver a valorar cuál debería ser la subida del salario mínimo interprofesional.

Mostrar comentarios