Cuarto trimestre de 2022

La carga financiera de las micropymes crece un 87% pese al recorte del crédito

El informe de CEPYME refleja que las empresas de menos de 10 trabajadores son las más golpeadas por el aumento de la inflación y los costes del empleo, que ha llevado a perder hasta 6.262 empresas de este tipo.

Pequeño comercio
La carga financiera de las micropymes crece un 87% pese al recorte del crédito. 
EUROPA PRESS

La inflación, el aumento de la carga financiera y el alza de los costes laborales como consecuencia de la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) han recortado los márgenes de las pequeñas y medianas empresas españolas. Así se desprende del informe elaborado por la patronal CEPYME, presentado este martes en su sede de Madrid, que hace un balance de la coyuntura que atraviesan las compañías de menos de 250 empleados a partir de los datos del cuarto trimestre de 2022. Entre sus conclusiones, el documento refleja que el endurecimiento de las condiciones de acceso al crédito ha estabilizado el ratio de endeudamiento, sin embargo, no ha contribuido a aminorar la carga financiera, que ha crecido por encima del 87% para las microempresas y del 126% para las medianas en el último año. 

El ratio de endeudamiento hace referencia a la relación entre el pasivo total y el patrimonio neto de las compañías y el proceso de estabilización señalado lo ha situado en el 88% de media durante todo el 2022. Sin embargo, pequeñas y medianas empresas presentan diferencias en esta cuestión. Las de menor tamaño incrementaron su endeudamiento en los dos últimos trimestres del año, algo que no sucedía desde 2007, alcanzando el 83,9% en los últimos cuatro meses de 2022, 1,4 puntos más que en el mismo periodo del año anterior. Mientras que las compañías medianas experimentaron el proceso contrario, su ratio de endeudamiento descendió hasta el 78,3% una proporción 10 puntos porcentuales menor que la de 2021. Un hecho que resulta destacable, dado que la última vez que la pequeña empresa tenía un ratio de endeudamiento mayor que la mediana fue en 2006. 

Sin embargo, los papeles se invierten en lo que se refiere al pago de intereses por los pasivos. La carga financiera se disparó un 126,8% para las empresas de mediano tamaño entre diciembre de 2021 y diciembre de 2022, pasando de los 156.300 uros anuales para la empresa promedio a alcanzar los 354.600. El incremento fue menor en el caso de las compañías pequeñas, aunque tampoco desdeñable, el pago de intereses por sus pasivos pasó de suponer 8.100 euros a final de 2021 a tocar los 15.200 a cierre de 2022, un alza del 87,8%, que sumado al aumento de los costes de la energía o la inflación puso en tela de juicio la viabilidad de miles de empresas tras la pandemia. 

Inflación y subida de los tipos de interés

CEPYME denuncia que la situación financiera de las pymes dista de ser satisfactoria, tras experimentar una subida de los intereses por encima del 3% en el cuarto trimestre, más de un punto respecto al trimestre anterior, algo que no ocurría desde 1995. Además, los empresarios destacan en el informe que se trata de la primera vez que se supera el nivel del 3% desde marzo de 2015, aunque entienden que el caso de 2022 es "más gravoso" porque el alza se produce respecto a niveles muy bajos, a diferencia de 1995 cuando estaba por encima del 9%. En cambio, la prima de riesgo que abonan estas empresas para financiarse cayó a mínimos históricos, hasta los 23 puntos base, por lo que deducen que los tipos de interés seguirán creciendo. 

Desde la patronal también entienden insuficiente el número de créditos concedidos en los últimos cuatro meses del 2022 que ascienden a 46.200 millones de euros, una cifra un 15,4% mayor a la de 2021. No obstante, apuntan a que este dato se ve distorsionado por el impacto de la inflación, que implica que los préstamos bancarios recibidos por las pymes en este periodo sea igual al 14,7% de las ventas, frente a 2017-2019, cuando suponían el 19,8%. A partir de esta referencia, CEPYME calcula que el importe de los préstamos debería haber sido 15.9000 millones de euros superior. Es decir, tendrían que haber sido un 34% superiores para igualar la financiación del bienio 2017-2019. 

Las empresas de menos de 10 trabajadores son las que más han sufrido el aumento de costes generalizado, a pesar de que el impacto de la energía fue mucho menor en los últimos meses del año, lo que llevó a cerrar más de 6.000 negocios de este tipo antes de diciembre de 2022. Son precisamente estas compañías las más afectadas por la subida del SMI a 1.080 euros, dado que supone un incremento de sus costes laborales del 5,8%, frente al 4,2% de las medianas. En las empresas con menos de 50 trabajadores la remuneración media bruta se ha elevado hasta los 1.553 euros mensuales, mientras que la de aquellas con entre 50 y 199 empleados asciende a 1.925 euros al mes. 

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