Caso nóos. Urdangarin admite que pensaba que las cuentas de nóos “no eran transparentes”

El duque de Palma, Iñaki Urdangarin, aseguró en su declaración como imputado ante el instructor del “caso Nóos”, el juez José Castro, que tenía la sensación de que las cuentas del Instituto Nóos no eran transparentes, pero dijo que no decidió denunciar a su socio, Diego Torres, porque quería “acometer otros proyectos” y porque no tenía “las evidencias legales”.
Aún así, señaló que “a día de hoy”, con todo lo aportado por la investigación judicial, tampoco tiene la intención de denunciar a Torres. Esta es una de las claves de la declaración judicial prestada este fin de semana durante 22 horas por el yerno del Rey, a cuya trascripción ha tenido acceso Servimedia.
Urdangarin dijo ante el magistrado que no se involucraba en la contabilidad o en las facturas de Nóos y que su trabajo consistía en ser una especie de relaciones públicas de “alto nivel”.
Señaló, en este sentido que, como presidente del Instituto Nóos, sus tareas consistían en “llevar la relación institucional de alto nivel”, “hacer el seguimiento de las relaciones comerciales que surgían de dichas relaciones” así como “aportar sus experiencias deportivas a los distintos proyectos”. Uno de sus objetivos era también “involucrar a las máximas personas posibles”.
El marido de la infanta Cristina quiso dejar claro que no se hace responsable de las acciones de las demás personas “que integran” el Instituto Nóos.
MANEJO DE LAS CUENTAS
El yerno del Rey aseguró, asimismo, no tener “firma autorizada” en las cuentas del Instituto Nóos ni en las de Nóos Consultaría. El juez Castro le explicó entonces que la Agencia Tributaria ha averiguado que en las cuentas del organismo aparece él como firma autorizada, a lo que el imputado respondió que era “la primera noticia” que tenía sobre este aspecto.
Afirmó que era el secretario y asesor fiscal del Instituto Nóos, Miguel Tejeiro, cuñado de Torres, quien revisaba las cuentas. Él las firmaba si Tejeiro le decía que “no había observado ninguna irregularidad”.
El marido de la infanta dijo ignorar, en este sentido, que si “firmando las cuentas anuales” estaba con ello “dando el visto bueno a la administración de Torres”.
Urdangarin reiteró que las facturas del Instituto Nóos eran “competencia” de Torres y del contable, Marco Antonio Tejeiro, el hermano de Miguel. Indicó que no le producía “ningún recelo” que la profesión inicial de Tejeiro fuese la de farmacéutico. El duque de Palma negó, asimismo, tener “cuenta alguna” ni en Luxemburgo, ni en Reino Unido ni en Belice.