Madrid, 28 ene.- La mexicana Cemex comunicó hoy a sus trabajadores en España un nuevo proceso de despido colectivo que afectará a un máximo de 156 empleados, el 15 % de la plantilla.
Esta será la continuación del ajuste que puso en marcha a finales de 2012 para sus instalaciones productivas, y según informó hoy la compañía mexicana en un comunicado, el periodo de consultas se extenderá durante 30 días.
La medida está dentro del Plan Horizonte, un plan de viabilidad con el que Cemex prevé continuar operando en España y hacer frente a la crisis que atraviesa el sector.
Y es que el consumo de cemento cerró 2012 con una caída del 34 % y 13,5 millones de toneladas, una cifra que representa el mayor descenso porcentual experimentado por el mercado doméstico español a lo largo de su historia, según datos de la patronal cementera Oficemen.
Una situación a la que Cemex añade la "escalada" de los costes "sin precedente", especialmente aquellos derivados de la tarifa eléctrica, y la consecuente pérdida de competitividad.
En virtud de este plan de negocio, Cemex y los sindicatos ya acordaron en noviembre reducir el número de afectados por el expediente de regulación de empleo (ERE) en sus centros de producción desde los 370 iniciales a 339 en distintas plantas en España.
Con todo ello, y tal y como anunciaron ayer los sindicatos, el número total de afectados por el expediente de regulación de empleo (ERE) se reduce a 280 ya que además de los 31 trabajadores que se quedarán finalmente en la empresa, la compañía interiorizará hasta 59 puestos de trabajo.
El objetivo de estos ajustes es redimensionar la capacidad industrial para adaptarla a la nueva realidad del mercado, para lo que se ha llevado a cabo una fusión de las zonas comerciales y operativas para simplificar la organización y reducir la distancia con los mercados y los clientes.
En este contexto, la compañía ha llevado a cabo además la integración societaria de todos sus negocios a fin de agilizar y facilitar los procesos y la relación con los clientes, al tiempo que ha reorganizado la estructura de gestión de la compañía.
El fin del plan es asegurar la operación de Cemex en España, mediante el refuerzo la presencia en aquellos mercados de mayor valor y la oferta de unos productos más rentables y eficientes, indica la cementera.
La compañía espera que el cumplimiento de estos objetivos proporcione mejores oportunidades comerciales fuera de España y fortalezca la capacidad exportadora de Cemex.
Con esta decisión, Cemex se suma así a Cementos Portland Valderrivas, filial del grupo FCC, y a Holcim, que se han visto también abocadas a realizar ajustes de plantilla ante la caída del mercado.
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