Comisión del PE pide crear un sólido sistema de supervisión bancaria única

  • La Comisión de Economía del Parlamento Europeo aprobó hoy un informe que pide la creación de un "sólido" sistema de supervisión bancaria único como elemento "clave" para la creación de la futura unión bancaria.

Bruselas, 29 nov.- La Comisión de Economía del Parlamento Europeo aprobó hoy un informe que pide la creación de un "sólido" sistema de supervisión bancaria único como elemento "clave" para la creación de la futura unión bancaria.

Los europarlamentarios respaldan la propuesta de la Comisión Europea para que el Banco Central Europeo (BCE) sea el supervisor responsable de todos los 6.000 bancos de la eurozona, aunque se dedicará principalmente a vigilar a los bancos que han recibido ayudas públicas y aquellos que puedan suponer un riesgo sistémico para el conjunto del sistema financiero.

El BCE tendrá la última palabra, mientras que las autoridades nacionales competentes se encargarán de la supervisión diaria y del resto de los bancos en colaboración con la institución monetaria.

Se considerarían adoptadas las decisiones supervisoras tomadas por las autoridades nacionales salvo que el BCE las rechace.

No obstante la entidad monetaria siempre tendrá la capacidad de hacerse con la supervisión directa de un banco si lo considerara necesario, afirman los eurodiputados.

El texto indica que, aunque el Banco Central Europeo (BCE) ha sido señalado como la entidad mejor situada para llevar a cabo esa supervisión única, éste "debe someterse a las reglas de la Autoridad Bancaria Europea" (ABE), que debería ser trasladada de Londres a Fráncfort, en opinión de los diputados europeos para agrupar los organismos reguladores.

Los liberales europeos expresaron mediante enmiendas su preocupación porque el BCE sea el encargado de la supervisión al considerar que podría entrar en conflicto de intereses por el papel de la entidad de Frankfurt como guardián de la política monetaria y la falta de control democrático de la misma por su propio carácter independiente.

A propósito de que la sumisión o no a la supervisión única del BCE de los países que no forman parte de la eurozona, los eurodiputados alertaron de que esa circunstancia pueda traer "divisiones".

Para subsanar este problema, los diputados han equilibrado el balance de poderes entre ambas partes, al igual que han decidido ya los países miembros en sus negociaciones.

De este modo, todos los países tendrán el mismo derecho de veto en el consejo supervisor en el seno del BCE que se creará y en el que participarán todos los Estados miembros. Cuando las decisiones pasen al Consejo de Gobierno de la institución monetaria -donde solo están los países de la eurozona- éste no podrá cambiar las propuestas y únicamente podrá pedir que se cambie el acuerdo.

Eso permitirá a los países de fuera del euro a mantener influencia sobre la toma de decisiones.

Los eurodiputados también han respaldado la modificación del mecanismo de votación en la ABE para reducir las desigualdades entre los países del euro y los que no participarán en el supervisor bancario único.

Por su parte, la comisión parlamentaria ha decidido que el BCE tenga que rendir cuentas por eventuales errores de supervisión y que el nombramiento del presidente del consejo supervisor sea aprobado por el Parlamento Europeo.

También quiere que se establezca un consejo de apelaciones que atienda las quejas que puedan derivarse de las decisiones de supervisión del BCE.

Los ministros de Finanzas de la UE tendrán que adoptar en su próxima reunión del día 4 una posición negociadora para iniciar el llamado "trílogo" con el Parlamento Europeo y la Comisión Europea.

El objetivo es tener listo el marco legal antes de fin de año, tal y como acordaron los líderes en la cumbre de octubre. EFE

lmi-cae/cbm

(Para más información del Parlamento Europeo www.europeo.com)

Mostrar comentarios