Entender la nueva factura de la luz: los componentes que deberías conocer

En menos de una semana los consumidores pasarán a tener una factura de la luz diferente. Este cambio supondrá que las compañías aplicarán la discriminación horaria a todos los clientes, independientemente de si están acogidos al PVPC (Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor) o al mercado libre.

Los tres nuevos periodos tendrán un precio mayor o menor dependiendo de la hora del día que corresponda. El tramo más caro se concentrará de 10:00 a 14:00 horas y de 18:00 a 22:00 horas. Mientras que en el resto de periodos se aplicará un importe más bajo. Los fines de semana y los festivos tendrán una cuantía estable, por lo que muchos clientes cambiarán sus rutinas para tratar de pagar menos.

Los clientes que lo deseen podrán ajustar su potencia a las necesidades de consumo para reducir el recibo. Con el objetivo de facilitar la adaptación a esta nueva factura, se permitirán realizar dos cambios gratuitos hasta el 31 de mayo de 2022.

Composición del recibo

Aparte de los datos personales, la fecha, el tipo de contrato o los peajes, la factura constará de distintos costes asociados a los gastos de consumo o los impuestos aplicables, tal y como detalla la CNMC. Los cinco puntos principales que los consumidores deben tener en cuenta son:

Los costes de la energía detallarán el consumo y el precio fijado en el mercado. Este importe, como se mencionaba anteriormente, estará marcado por las horas establecidas. 

Otros conceptos regulados incluidos en este punto serán los pagos por capacidad, que asegura el suministro de los clientes, el operador del sistema, que gestiona la producción y el consumo en tiempo real, y el operador del mercado, que valora las ofertas existentes para determinar el precio final.

Costes e impuestos asociados

En relación con los costes regulados se tendrán en cuenta los de las redes de transporte y distribución, los asociados al fomento de energías renovables, el diferencial de coste de producción en territorios no peninsulares y las anualidades de déficit de ejercicios anteriores.

El margen de comercialización se referirá al pago que realiza la empresa energética por los servicios prestados. Se incluirá el precio regulado para los consumidores con PVPC con un término fijo de la potencia contratada y otro variable, para la consumida. Para el resto de consumidores el precio estará pactado libremente. 

 

En la factura, lo referido al alquiler de equipo de medida será el precio regulado cobrado a los que no tengan un contador propio. El resto de impuestos atenderán a la electricidad (IE) o al IVA, que ya se aplican actualmente.