Cómo funcionan las deducciones por vivienda en la renta 2017

  • La deducción por inversión en vivienda habitual es posible si se adquirió antes de 2013 o si se trata de rehabilitación con financiación de un tercero
Cómo funcionan las deducciones por vivienda en la renta 2017
Cómo funcionan las deducciones por vivienda en la renta 2017

La vivienda juega un papel fundamental en la declaración de la renta de miles de ciudadanos. ¿Por qué? La deducción por inversión en vivienda habitual se suprimió desde el 1 de enero de 2013. No obstante, para los contribuyentes que venían deduciéndose con anterioridad a esta fecha, cuentan con un régimen transitorio, que les permite seguir disfrutando de la deducción en los mismos términos existentes a 31 de diciembre de 2012. Esa fecha supuso el fin de las deducciones fiscales a nivel nacional excepto en País Vasco y Navarra, donde se mantiene.

Es importante hacer hincapié en que esta deducción no solo se cierne a compra o adquisición de vivienda habitual sino que también se extiende a la rehabilitación de la vivienda. En este caso, se pueden cumplir dos escenarios:

- Que las obras hayan sido declaradas como actuación protegida en materia de rehabilitación de vivienda.

- Que las obras tengan por objeto la reconstrucción de la vivienda mediante la consolidación y el tratamiento de las estructuras, fachadas o cubiertas.

El importe máximo de deducción por las inversiones dirigidas a la adquisición y rehabilitación de vivienda habitual es de 9.040 euros, lo que supone un 15% de los gastos hipotecarios. En caso de alcanzar este límite el contribuyente conseguirá la deducción máxima de 1.356 euros anuales.

Además, hay que tener en cuenta el número de titulares de la hipoteca, puesto que cada uno de ellos se puede acoger a la deducción por compra de vivienda habitual con el tope de 9.040 euros.

Explican desde la Agencia Tributaria que cuando la adquisición o rehabilitación se realicen con financiación ajena, las cantidades financiadas se entienden invertidas a medida que se vayan amortizando los préstamos obtenidos. En estos supuestos, formarán parte de la base de la deducción tanto la amortización del capital como los intereses y demás gastos derivados de dicha financiación.

Cualquier decisión tomada a partir del 1 de enero de 2018, no computará hasta la declaración de 2019.

Mostrar comentarios