Convención pp. Rajoy defiende que el pp no se puede permitir “bajo ningún concepto” que la corrupción “oculte” la recuperación

El presidente del Gobierno y del PP, Mariano Rajoy, defendió este domingo que el Partido Popular no se puede permitir “bajo ningún concepto” que los casos de corrupción “oculten el cambio hacia la prosperidad”.
Rajoy realizó estas declaraciones en la clausura de la Convención Nacional que el PP celebró este fin de semana en Madrid bajo el lema ‘Juntos por un gran país’, en la que estuvo presente todo el Comité de Dirección del PP, los barones y presidentes regionales y, también, el expresidente del Gobierno José María Aznar.
“No podemos permitir bajo ningún concepto que estas cuestiones oculten que lo que ha ocurrido en España, que no es más que el cambio hacia la prosperidad”, defendió ante los suyos en una semana marcada por la salida de prisión del extesorero del PP Luis Bárcenas y sus acusaciones sobre el hecho de que Rajoy conocía “desde el principio” la ‘caja b’ del PP.
Rajoy trasladó que ante los casos de corrupción el PP ya ha ofrecido “respuesta” y afirmó que los populares no están “dispuestos a permitir que estas cuestiones empañen la honorabilidad de los votantes y el respeto de las instituciones del país”.
Dijo que lo que más le preocupa “es la realidad” que supone que “algunos que fueron de los nuestros no hayan estado a la altura de la historia y la trayectoria de este partido y de lo que los españoles esperan de él”.
“Si se ha descubierto alguna conducta punible ha reacccionado con un nivel de exigencia que demanda la democracia y esperan los españoles”, apuntó para confiar en que se puede “prevenir” muchos casos de corrupción y que deben “castigarlos todos” porque en España “no hay impunidad y las instituciones funcionan y las irregularidades se sancionan”.
"ERRORES"
“En el PP hemos cometido errores y pudimos hacer las cosas mejor, eso ya está reconocido ante vosotros y ante todos los españoles”, dijo para apuntar a su comparecencia ante el Congreso de los Diputados el 1 de agosto de 2013.
El presidente del Gobierno admitió, a partir de ahí, que el PP no puede “garantizar todas las conductas de todos y cada uno de los cargos públicos”. “A lo mejor otros sí”, ironizó para prometer una respuesta “firme y contundente” ante los casos de corrupción.
Admitió que es una cuestión que “invita a la demagogia más feroz y al oportunismo político de la peor condición”, pero aseguró que no le inquietan “las exageraciones interesadas ni las manipulaciones”. “No es la primera vez que hablo y lo seguiré haciendo mientras este asunto exista, escandalice y desmoralice a las personas de bien”, comprometió.
Pero apuntó que el PP no debe fijarse en la oposición. “No debemos mirar a nuestros adversarios, sino a nosotros, no son nuestros rivales los que nos obligan a dar una respuesta, sino los españoles y el valor de la democracia, es nuestro partido”, argumentó.
“Hemos aprobado muchas reformas en esta legislatura para hacer de España un país mejor en lo social y lo económico, más justo y más próspero y cuando conculuya queremos que sea un país mejor en el terrreno ético y con mayor calidad democrática”, apuntó.
El jefe del Ejecutivo defendió que los políticos están “para servir al bien común” porque, recalcó, “nadie debería llegar con la ambición de obtener réditos personales”.