Deliveroo se desentiende de los siniestros de sus 'bikers': "Contrátate un seguro"

  • Un email interno para los repartidores es la prueba principal de su sometimiento a la empresa, según la sentencia que los considera falsos autónomos
Fotografía Deliveroo
Fotografía Deliveroo
Deliveroo

"Si desafortunadamente tienes un accidente, lo primero es que busques ayuda médica para ti y para las personas que se vean involucradas en el accidente", explica el correo electrónico que Deliveroo envía a todos sus repartidores nada más entrar a trabajar en la empresa. Pero, acto seguido, el 'email' deja claro que la compañía de servicio de comida a domicilio se desentiende de cualquier accidente que pueda tener el trabajador. "Como trabajas por cuenta propia, está en tu mano el tener seguro de responsabilidad civil y/o mutua de accidentes. Se os recomienda encarecidamente que el seguro que tengáis contratado para vuestra persona en caso de accidente sea el óptimo".

Ese documento está reproducido en la sentencia del Juzgado de lo Social número 6 de Valencia que ha concluido que estos 'riders' son falsos autónomos, es decir, trabajadores en régimen general a todos los efectos, y por eso condena a la compañía por el despido improcedente de uno ellos a readmitirlo o indemnizarlo. El juez se basa en gran parte en ese documento para justificar que la labor de estos trabajadores es totalmente dependiente del empleador que es quien pone las condiciones de trabajo unilaterlamente. Además, según la sentencia, trabajan por cuenta de esta, cumpliéndose así los dos requisitos -"dependencia y ajenidad"- para considerar su contrato laboral y no mercantil.

De ese email, titulado "informationBikers_VLC" se desprende que el 'rider', pese a haber firmado un contrato "de naturaleza mercantil" como "contratista independiente", debe cumplir todas las directrices de la compañía. Como la obligación de descargarse en su móvil la aplicación de la empresa. "Tu teléfono sonará cuando te llegue un pedido y podrás ver los detalles en la app. RECUERDA: Tienes que INICIAR y CERRAR  sesión en la app, en el punto de control de la zona asignada en el turno indicado por el equipo de operaciones", explica el texto del mensaje. 

La empresa decide turno y zona

Así, por ejemplo, la zona en la que trabaja cada repartidor y el turno dependen en última instancia de Deliveroo. "¿Donde desarrollas los repartos?", dice el correo electrónico. Acto seguido responde: "Se te asignará un área y se enviará un mapa por email en el que aparece la ubicación de los puntos de control y las diferentes zonas de reparto. Es importante conocer el área, siempre contarás con apoyo de Google Maps, pero vuestra intuición y el conocimiento de la zona hará que lleguéis antes a los sitios". 

El documento explica también que el trabajo en la empresa se distribuye en tres turnos (comidas, meriendas y cena) y que es el 'rider' el que, en principio, propone cuando quiere trabajar. Pero en las instrucciones dice: "Por favor, recuerda que se tendrá en cuenta positivamente que prestes servicios de reparto las noches de viernes, sábado y domingo. Las cenas son horarios de mayor actividad, te necesitamos!!". La sentencia considera probado además que Deliveroo puede asignar un turno en contra de la voluntad del repartidor. Si el 'biker' quiere cambiarlo debe buscar a otro que se lo haga y comunicarlo a la empresa que es la que decide en última instancia.

Ese correo daba además instrucciones concretas de cómo deben repartirse los pedidos, fijando los tiempos y las normas de comportamiento que deben cumplir estos trabajadores. Además, estos están continuamente geolocalizados a través de la aplicación de la empresa y podía pedirles explicaciones por retrasos, el servicio prestado... "Es muy importante vuestra actitud con los clientes, sois la cara de la empresa", señala el 'email'. "Debe ser cordial, siempre presentándoos cuando llaméis al telefonillo, por ejemplo: 'Hola, soy María de Deliveroo, ¿está... (nombre del cliente)...? ¿me puede abrir?. Cuando os despidáis decidle por ejemplo 'que lo disfrute!!".

Si falta algo, responsable el repartidor

También se explica, entre otras indicaciones que, en caso de que en las bolsas en las que se distribuya el pedido de comida no contengan todos los productos solicitados por el cliente, no es responsabilidad de la empresa ni del restaurante que los haya elaborado, sino del propio repartidor. "Si faltase algún producto cuando lo entreguéis a los clientes será vuestra responsabilidad y una incidencia en vuestra ficha", dice el mensaje al explicar cómo actuar en caso de que la bolsa del pedido se entregue grapada y no pueda examinarse lo que hay en su interior. 

El juez considera demostrado además que el trabajo es por cuenta ajena. Las pruebas que le llevan a esa conclusión es que es Deliveroo quien decide el precio de los servicios prestados por el trabajador consistente en 3,38 euros brutos por cada servicio realizado. Es la empresa la que establece también las condiciones de los restaurantes adheridos y de los clientes a los que presta sus servicios. "También era la empresa la que fijaba el precio del servicio a los clientes y cobraba este a través de la aplicación, no estando permitida por el trabajador la percepción de cantidad alguna en metálico, a salvo la propina", explica la sentencia.

Y concluye: "Dado que el trabajo del demandante [del repartidor de Deliveroo] se incardina dentro del ámbito de organización y dirección de la empresa demandada, debe concluirse la existencia de una relación laboral entre las partes". La resolución puede ser recurrida ante la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV).

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