Marca la orientación de la política económica 

Economía descarta el castigo del mercado al Gobierno y prevé una deuda más barata

Congreso de los Diputados
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Europa Press

Los Presupuestos Generales del Estado concretan la orientación de las políticas económicas de cualquier Gobierno, pero la estrategia de emisión de deuda del Tesoro determina en buena medida los recursos de que dispondrá el Gobierno para poner en marcha esas políticas. La acción del Tesoro, además, no sigue de los tiempos de la política y no espera a que el Gobierno asiente sus prioridades para salir al mercado. Este desfase ha permitido a la ministra de Economía en funciones y probable vicepresidenta económica del futuro Gobierno de coalición de las izquierdas, Nadia Calviño, ser la primera en marcar orientación sobre la política económica del futuro Gobierno.

Lo ha hecho a través de la Estrategia de Financiación del Reino de España para 2020 que ha presentado este miércoles el secretario general del Tesoro, Carlos San Basilio, quien ha dejado bien sentado que el plan de emisión de títulos de deuda de España para el próximo año se basa en el bien entendido de que España continuará avanzando en sus objetivos de consolidación fiscal en el primer año del nuevo Gobierno de coalición, continuando con la reducción del déficit y acelerando en la medida de lo posible la reducción de la deuda pública, que cerrará 2019 en el entorno del 96%, aún muy lejos del 60% que admite Bruselas y en el filo de lo que Europa exige a España para no volver a tirar de los 'hombres de negro' para controlar las cuentas españolas.

El secretario del Tesoro ha subrayado también que no esperan ningún 'castigo' del mercado al nuevo Gobierno ni por el sesgo político de sus socios ni por las potenciales medidas que pueda llevar a cabo. "Los inversores se guían más por los fundamentales de la economía que por las medidas concretas que pueda adoptar un Gobierno. Lo que más temen es la incertidumbre y lo que se ha hecho estos días es precisamente contribuir a disipar esa incertidumbre", ha explicado Carlos San Basilio.

El alto cargo del Ministerio de Economía ha recordado asimismo que uno de los principales factores que pesaban en negativo sobre la consideración de España por las agencias de rating era la situación de inestabilidad política por lo que augura que esto ya dejará de ser un obstáculo en el futuro. "Es difícil prever si veremos subidas del rating de España en los próximos meses, pero lo que sí creemos es que en la medida en que habrá un Gobierno que adopte medidas y en la medida en que éstas se ajusten a lo que ya hemos trasladado dentro de la Agenda del Cambio la prima de riesgo de la deuda española debería caer en 30 o 40 puntos en los próximos meses".

La frase no tiene desperdicio, porque por un lado supone un mensaje de calma y ahuyenta los malos augurios sobre una posible reacción negativa de los mercados ante la nueva coalición de Gobierno de las izquierdas, pero por otra asocia la positiva reacción de los inversores al nuevo Ejecutivo español al mantenimiento de la senda de consolidación fiscal y al programa de reformas pactado con Bruselas. Aviso a navegantes. El secretario del Tesoro repitió este miércoles hasta en cuatro ocasiones que el programa de emisiones del Tesoro para 2020 se sostienen sobre un planteamiento continuista de política económica sustentado en la reducción del déficit y la deuda y el programa de reformas de la Agencia del Cambio.

Sobre esa base, el Tesoro tiene previsto emitir 196.504 millones de euros en términos brutos durante el año 2020 -la menor cuantía desde el año 2011-, lo que supone una emisión neta -detraídas las amortizaciones de títulos- de 32.500 millones de euros, frente a los 35.000 millones de euros que se 'pintaron' en 2019. El asunto es que la emisión neta de 2019 cerrará en el entorno de los 20.000 millones de euros y ese 'gap' de 12.500 millones de euros extra es difícil de entender cuando se supone que el déficit público va a ir a menos y las condiciones de financiación parece que seguirán más o menos como este año.

La explicación oficial que trasladó este miércoles el Tesoro a ese importante colchón extra apuntaba a la concurrencia en 2019 de factores que quizá no se repitan en 2020, como la preamortización de 5.273 millones de euros de deuda de las CCAA con el Estado o la mejora comparativa del coste de la financiación respecto a lo inicialmente previsto. ¿No será que se están protegiendo ustedes ante un eventual incremento del gasto público en los Presupuestos de 2020, los primeros del nuevo Gobierno de las izquierdas?, le preguntaron los periodistas al alto cargo del Ministerio de Economía. "No. Nuestro deseo es que esta previsión de emisiones se mantenga una vez presentados los Presupuestos Generales del Estado y tampoco esperamos que se vaya a producir un incremento de nuestros costes de financiación por un eventual rechazo a las medidas políticas que promueva el Gobierno".

La previsión del Tesoro es más bien la contraria. Carlos San Basilio admitió que el Tesoro había querido dotarse de un 'margen de seguridad' ante posibles eventualidades, dado que todavía no se conocen factores básicos como las necesidades de deuda de las comunidades autónomas o el préstamo que necesitará la Seguridad Social -incógnitas que no se despejarán hasta dentro de unos meses y que el Tesoro ha resuelto consignando las mismas cuantías que en 2019-, pero apuntó a que lo más probable es que a lo largo de 2020 se produjera una mejora de las condiciones de financiación del país.

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