El 40% de las cotizadas españolas está en manos extranjeras

La bolsa española es protagonista de un nuevo récord: el 40% del valor de todas las compañías españolas que la componen ya está en manos de inversores extranjeros. Este resultado, producto de un informe del Servicio de Estudios de Bolsas y Mercados (BME), es el más elevado de la serie histórica y un 7,5% superior al registrado en 2006, justo antes de que estallara la crisis económica y financiera internacional.

Desde entonces, la estructura de propiedad de las cotizadas españolas ha cambiado mucho. Los inversores nacionales, por ejemplo, están reduciendo sus participaciones en bancos y cajas de ahorros, hasta registrar el nivel mínimo histórico.

Este vacío que dejan los inversores españoles en el sector bancario no se ve equilibrado con el repunte de la participación de otros sectores como las familias, cuya participación crece un 1% -y alcanza el 21,1% del total-, o la inversión colectiva -a través de fondos de pensiones y de inversion-, que también registran un ligero incremento.

El motivo de la caída de la participación en los valores financieros, explica BME, está impulsado por las crecientes necesidades de liquidez y el previsible aumento de las necesidades de capital de las entidades españolas. Pero este escenario está siendo aprovechado por los inversiones extranjeros para aumentar su participación en la bolsa española... hasta hacerse con el 40% actual.

Sin embargo, el estudio también detalla que, en las últimas dos décadas, el porcentaje de participación extranjera en el mercado bursátil español siempre ha estado por encima del 30%. Además, este spring inversor también ha sido consecuencia de la toma de control de algunas compañías españolas importantes en términos de capitalización bursátil (valor en bolsa) por parte de otras extranjeras, como ha ocurrido con Endesa, la eléctrica adquirida por la italiana Enel.

Inversores individuales y sector financiero

El estudio de BME señala que, a pesar de que la participación de las familias en el mercado bursátil español (del 21,1%) no compensa el aumento de la inversión extranjera, sigue siendo una de las más elevadas de Europa. De hecho, según los datos relativos a 2007, la participación de los inversores individuales ya se situaba en el 20,1%, mientras que la media continental se estancaba en el 14%.

Por otro lado, el texto argumenta que la participación del sector financiero en las cotizadas españolas se ha desplomado hasta el 13%, desde el 18% registrado al cierre de 2007 y a los máximos del 23% de hace trece años. Pero esta progresiva reducción responde a un claro porqué: las fuertes desinversiones que ha tenido que realizar el sector para sobrevivir a la crisis.