El A350 de Airbus entra en su recta final con su primer vuelo de pruebas

  • Un avión A350 del fabricante europeo Airbus efectuó hoy su primer vuelo de pruebas, lo que marca la recta final de su entrada en servicio comercial de este aparato de mediana capacidad y larga autonomía con el que el fabricante aeronáutico pretende competir con el 787 de su rival estadounidense Boeing.

París, 14 jun.- Un avión A350 del fabricante europeo Airbus efectuó hoy su primer vuelo de pruebas, lo que marca la recta final de su entrada en servicio comercial de este aparato de mediana capacidad y larga autonomía con el que el fabricante aeronáutico pretende competir con el 787 de su rival estadounidense Boeing.

El primer vuelo, que levantó una gran expectación mediática en el aeropuerto de Toulouse, en el sur de Francia, ciudad que alberga la planta de ensamblaje de Airbus, comenzó a las 8.00 horas GMT, duró cuatro horas y abre la puerta a un año de test durante el cual el aparato debe quedar listo para ser entregado a sus clientes.

El vuelo estuvo tripulado por pilotos e ingenieros, bajo la dirección del español Fernando Alonso, responsable de las pruebas del fabricante europeo y abre la puerta a más de 2.500 horas de test en el aire.

Tras ellos, la aerolínea catarí Qatar Airways recibirá el primero en la segunda mitad del año próximo, según Airbus, que se niega a dar una fecha concreta ante la "complejidad" del programa, que ya ha sufrido dos retrasos de, en total, año y medio.

El presidente de Airbus, Fabrice Brégier, afirmó sentirse "orgulloso" de sus equipos, capaces de lanzar un desafío técnico y comercial.

El A350 es el primer nuevo modelo que sale de las factorías de Toulouse desde que hace 8 años fue lanzado el A380, el avión comercial más grande del mundo, y no se espera que salga otro nuevo en esta década.

En total, es el séptimo nuevo modelo que sale de la factoría de Toulouse desde la creación de Airbus, propiedad del consorcio europeo EADS, en 1970 y no se espera que otro nuevo lo haga hasta, al menos, finales de la próxima década.

Para competir con el 787, el aparato más vendido de ese segmento en el mundo, Airbus ha apostado por dotar al A350 de materiales más ligeros, con lo que asegura que consume un 25 por ciento menos que su rival.

El nuevo avión, dotado de dos reactores fabricados por la británica Rolls Royce, cuenta con muchos componentes de fibra de carbono, en particular las alas, de 32 metros de largo y 6 de ancho, la pieza de ese material nunca construida para la aviación comercial.

Parte de ese ala se ha fabricado en la planta de Airbus en la localidad toledana de Illescas, indicó a Efe un portavoz de la aerolínea, que precisó que el ensamblaje se hizo en Reino Unido.

No es la única aportación española al nuevo avión. El estabilizador horizontal, una de las partes más sofisticadas de la cola del aparato, se ha hecho en las plantas de Getafe y Sevilla y se ha ensamblado en la madrileña, antes de su envío a Toulouse, todo ello en fibra de carbono.

España también aporta una parte de la panza del avión, indicó el portavoz.

Con esas características, Airbus pretende reducir la distancia que le lleva el 787, que está en el mercado desde el otoño de 2011 y que acumula 890 pedidos, frente a los 613 del A350.

El avión dispondrá de tres configuraciones y podrá transportar entre 270 y 350 pasajeros a un radio de 15.000 kilómetros sin escala.

Está dirigido al que se espera que sea el segmento de la aeronáutica más dinámico de los próximos años, con una demanda estimada de 5.000 aviones en los próximos 20 años.

Airbus ha invertido más de 10.000 millones de euros en este modelo, algo más de lo que le costó en su día desarrollar el A380.

Pero el fabricante europeo espera garantizar gracias a él unos 35.000 empleos en los 20 años próximos.

Su llegada al mercado acumula año y medio de retrasos, pero son menos que los tres años del 787, ligados esencialmente a sus baterías de litio, que le obligaron a estar varios meses en tierra a causa de un problema de recalentamiento.

Airbus ha optado por no equipar su modelo con esas baterías y ha apostado por equipamientos más tradicionales para evitar problemas de industrialización.

Mostrar comentarios