El apoyo de Bildu garantiza el proyecto de fusión de las tres cajas vascas

  • El apoyo al proyecto dado a conocer hoy por los representantes de Bildu garantiza el desarrollo del proceso de fusión de las tres cajas vascas de ahorro y la obtención de mayoría necesaria en las respectivas asambleas.

Bilbao, 13 sep.- El apoyo al proyecto dado a conocer hoy por los representantes de Bildu garantiza el desarrollo del proceso de fusión de las tres cajas vascas de ahorro y la obtención de mayoría necesaria en las respectivas asambleas.

El enésimo intento de fusión de las cajas vascas tenía garantizada la mayoría necesaria, dos tercios, en las asambleas de la vizcaína BBK y de la alavesa Vital, gracias, fundamentalmente, al respaldo de los representantes de los tres grandes partidos: PNV, PSE-EE y PP.

En la guipuzcoana Kutxa dependía bien de la postura de los representantes de CCOO, sindicato mayoritario, o de la actitud de la izquierda abertzale, que se consideraba contraria al proyecto.

Sin embargo, las negociaciones mantenidas por los presidentes de las tres entidades con representantes de Bildu culminaron ayer con un acuerdo que garantiza que el proyecto salga definitivamente adelante.

Según han expuesto hoy en rueda de prensa en San Sebastián los máximos representantes institucionales de Bildu, el diputado general de Guipúzcoa, Martín Garitano, y el alcalde de San Sebastián, Juan Karlos Izaguirre, el acuerdo garantiza el mantenimiento de la obra social y del control público de la nueva entidad, Kutxa Bank.

"Había que evitar la privatización y lo hemos conseguido", ha dicho Garitano, quien ha apelado a la discreción para no explicar qué tipo de garantías se han incluido en el protocolo de integración de las tres cajas.

Dicho protocolo establecía explícitamente que el nuevo banco, Kutxa Bank, no podría vender, en ningún caso, más del 49 por ciento de sus acciones, por lo que la mayoría estaría controlada siempre por las tres cajas fundadoras.

Bildu también se ha atribuido el compromiso de las tres cajas de mantener "sin límite de tiempo" la obra social, a la que se hará una aportación del 30 % de los beneficios del nuevo Kutxa Bank, un aspecto, que, según Garitano, "no quedaba claro" en el proyecto inicial.

La coalición abertzale, según ha explicado Garitano, ha obtenido también de los presidentes de las cajas el compromiso de que se respetará el "ámbito de negociación" (limitado exclusivamente a las comunidades vasca y navarra, o no) que los trabajadores decidan para fijar sus condiciones laborales.

Mediante este acuerdo los impulsores del proyecto se aseguran que la fusión salga adelante en la asamblea de Kutxa del próximo día 23, ya que a los 58 votos que sumaban los representantes de los partidos abiertamente favorables a la integración (PNV, PSE, PP, H1! y dos exmiembros de Alternatiba) hay que sumar ahora tres más de EA y ocho de ANV, que podrían ser incluso 12 más de la plataforma de clientes Banatuz, afín a la izquierda abertzale.

BBK y Vital celebrarán sus respectivas asambleas el próximo viernes, día 16.

En este nuevo escenario de acuerdo el consejero de Economía y Hacienda del Gobierno Vasco, Carlos Aguirre, se ha mostrado convencido de que "de aquí a final de año" la integración de las tres cajas de ahorros se habrá completado "sin sobresaltos" y con el "máximo consenso posible".

La fusión fría de BBK, Vital y Kutxa, en torno al banco Kutxa Bank, dará lugar a la cuarta caja y la octava entidad financiera española por activos, con 75.091 millones de euros al cierre del pasado ejercicio.

La nueva entidad comenzará a operar el 1 de enero de 2012. El Contrato de Integración establece la participación de cada caja en la nueva entidad: BBK tendrá el 57 por ciento; la Kutxa, el 32 por ciento; y la Vital Kutxa, el 11 por ciento.

Los activos y pasivos bancarios serán transmitidos al banco de nueva creación, Kutxa Bank, en el que se integrará el negocio de las tres cajas, con excepción de los activos y pasivos afectos a la obra social.

El nuevo grupo financiero vasco prevé casi triplicar sus resultados en sólo cinco años (380 millones de euros en 2010 y 846 millones de euros previstos para 2015), así como incrementar la dotación conjunta de las respectivas obras sociales desde los 105 millones del pasado ejercicio a los 245 millones de euros dentro de cinco años.

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