El Banco de España supo por la prensa de los sobresueldos de Catalunya Caixa

Barcelona, 21 oct.- Los inspectores del Banco de España han defendido hoy ante el juez la legalidad de los sobresueldos que cobraron exdirectivos de Catalunya Caixa, pero han afirmado que supieron de su existencia por la prensa y que, al enterarse, telefonearon al responsable de la entidad para llamarle la atención.

Según han informado fuentes judiciales, tres responsables de inspección del Banco de España y un técnico del FROB han declarado hoy como testigos ante el titular del juzgado de instrucción número 30 de Barcelona, que investiga los sobresueldos cobrados por exdirectivos de Catalunya Caixa, entre ellos el expresidente Narcís Serra y el ex director general Adolf Todó.

En la investigación, iniciada tras una denuncia de la Fiscalía Anticorrupción, permanecen imputados unos cuarenta miembros de la antigua cúpula de Cataluya Caixa, acusados de aprobar aumentos retributivos cuando la entidad estaba en situación crítica y tuvo que pedir una ayuda de 1.250 millones al FROB.

Los inspectores han argumentado ante el juez que los sobresueldos eran legales, ya que la remuneración aprobada figuraba dentro de los parámetros establecidos por las directivas europeas y era incluso inferior a la media del sector.

Sin embargo, los testigos han contradicho la versión de los directivos imputados -que aseguraron al juez que tanto el Banco de España como el FROB tenían conocimiento de los sobresueldos por los informes y memorias que se les remitían periódicamente- y han precisado que supieron de los mismos por la prensa.

Al tener constancia de la aprobación de esos sobresueldos, los responsables de Inspección han explicado que telefonearon a Adolf Todó para recriminarle una subida salarial que consideraban inadecuada desde el punto de vista "estético", dada la difícil situación económica que atravesaba Catalunya Caixa.

Los testigos, no obstante, han puntualizado que en el año 2010, en que se aprobaron los sobresueldos, Catalunya Caixa no estaba recibiendo dinero público y que el FROB se había limitado a concederle un crédito a un interés muy elevado y en un momento en que se creía que la entidad financiera aún era viable.

Los responsables del Banco de España han reconocido que la mala situación económica de Catalunya Caixa venía de los años 2004 y 2005 y que, en todo caso, Todó fue contratado para reflotarla y su fichaje formaba parte de la solución al problema que tenía la entidad financiera.

Los inspectores han añadido que las pérdidas económicas de Catalunya Caixa, entidad que acabó siendo nacionalizada, se produjeron en el ejercicio de 2010, aunque no afloraron hasta el 2011, por lo que cuando se aprobaron los sobresueldos todavía no estaban contabilizadas.

Además, han admitido que el FROB ratificó el contrato del nuevo director general, incluido el salario, aunque no tuvieron acceso a la cláusula de previsión social, que establecía todo tipo de beneficios económicos para los exdirectivos y sus familiares, según fuentes judiciales.

En la causa abierta por los sobresueldos a exdirectivos de Catalunya Caixa, el juez mantiene imputados a Todó y Serra, además de una cuarentena de miembros del consejo de administración de la entidad que aprobaron las remuneraciones extras.