El beneficio de Schneider avanzó un 4 % en 2013 hasta los 1.888 millones

  • El grupo francés de equipos eléctricos Schneider Electric anunció hoy que su beneficio en 2013 avanzó un 4 % hasta los 1.888 millones de euros, a pesar del impacto negativo en sus cuentas de los tipos de cambio, que el grupo cifra en 900 millones de euros.

París, 20 feb.- El grupo francés de equipos eléctricos Schneider Electric anunció hoy que su beneficio en 2013 avanzó un 4 % hasta los 1.888 millones de euros, a pesar del impacto negativo en sus cuentas de los tipos de cambio, que el grupo cifra en 900 millones de euros.

El pasado mes de octubre, el grupo ya había avisado de que el reflejo de los tipos de cambio sería más elevado que los 600 millones de euros con los que contaba.

La facturación de Schneider Electric se elevó a 23.550 millones de euros, un avance del 0,4 % en datos comparables, pero los tipos de cambio afectaron al beneficio operativo antes de amortizaciones e impuestos, que cayó hasta los 3.412 millones de euros, frente a los 3.515 del ejercicio precedente.

El presidente del grupo, Jean-Pascal Tricoire, definió los resultados como "sólidos, a pesar del ambiente económico difícil" y recalcó que fuera de Europa occidental, el grupo ha logrado un crecimiento del 3 % y progresar en otros ámbitos, lo que demuestra la capacidad de Schneider Electric para adaptarse "a un ambiente volátil".

El fabricante de equipos eléctricos repartirá a sus accionistas un dividendo de 1,87 euros por título y de cara a 2014 espera un alza de la facturación y que su Ebita progrese entre 0,4 y 0,8 puntos porcentuales sobre el dato de 2013, cuando representó un 14,5 % del volumen de negocios.

"Para 2014 vemos una economía bien orientada en Norteamérica y China y los primeros signos de estabilización en Europa occidental, aunque los signos siguen siendo inciertos en varias de las nuevas economías", declaró en un comunicado el presidente del grupo.

Por otro lado, Schneider Electric está en proceso de adquirir la británica Invensys por unos 3.900 millones de euros, operación que aún está pendiente del visto bueno de varios reguladores.

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