El Círculo de Empresarios propone elevar de 50 a 100 empleados y de 6 a 20 millones los umbrales para la empresa mediana

"Es preciso incentivar que las empresas españolas ganen en tamaño, porque esto supondrá un salto muy relevante en competitividad", ha manifestado esta mañana la presidenta deHispasat, ElenaPisonero, directora del Proyecto 'La empresa mediana española. Edición 2015', del Círculo de Empresarios, en un acto organizado por la APIE y moderado por su presidente, Iñigo de Barrón.Las empresas grandes y medianas han amortiguado más los efectos de la crisis. Las medianas son menos, sólo un 0,6 por ciento del tejido empresarial español, pero "se han mostrado más fuertes que las pequeñas durante la crisis, en innovación y en exportación", añadió ElenaPisoneroen la presentación del informe del Círculo de Empresarios.En España existen 18.000 empresas medianas, el 0,6 por ciento del total, que suponen el 13,6 por ciento del empleo, y el 17,6 de la producción, un porcentaje superior al de países como Reino Unido y Francia.Las grandes empresas españolas significan el 0,1 por ciento del total, y las pequeñas, con menos de 50 trabajadores y de 6 millones de euros de facturación, el 99,3 por ciento. Y acotando aún más los datos, el 94,5 de las empresas españolas tienen menos de 10 empleados.Pisonerodestacó especialmente uno de los cuadros del informe, en el que se aprecia con claridad la estrecha relación existente entre tasa de paro y microempresas. Andalucía y Extremadura encabezan la tasa de paro en España, y son las CCAA con un porcentaje mayor de empresas de 1 a 9 empleados, cercano al 90 por ciento.Los directivos del Círculo de Empresarios pidieron en el actoelevar de 50 a 100 empleados y de 6 a 20 millones los umbrales para considerar mediana una empresa. El presidente del Círculo, Javier Vega deSeoane, subrayó que estos umbrales producen un "efecto escalón" en la distribución de las empresas por tamaño que se traduce en un menor incentivo a adquirir el tamaño de mediana. De hecho, se percibe una acumulación anómala de empresas que cuentan con una plantilla cercana a los 50 empleados, y no dan el paso por las imposiciones fiscales, laborales y de auditoría que supone sobrepasar el límite de los 50 empleados.A su juicio, "es necesario dar dimensión a la empresa para acometer los procesos críticos que le permitan dotarse de mayor competitividad".Refiriéndose a la complejidad regulatoria que hay en España, Vega deSeoanecomentó que es más sencillo implantar una fábrica en Inglaterra -citó el caso de una industria alimentaria, sin dar el nombre-, que en España. ElenaPisoneroy el secretario general,JesusSainz, mencionaron asimismo la complejidad del entorno regulatorio que añaden las Comunidades Autónomas.Según el estudio, el número medio de empleados de las empresas medianas españolas es de 4,6, prácticamente la mitad que en Alemania o ReinoUnido. Además, durante la crisis, el tamaño medio empresarial se ha reducido, y ha aumentado el peso relativo de las microempresas (menos de 10 empleados).RafaelDomenech, Economista Jefe de Economías Desarrolladas de BBVAReseach, reflexionó sobre el aumento del tamaño medio de las empresas y la diversificación del tejido productivo, que requieren de un mejor acceso al crédito y el desarrollo de nuevas fuentes de financiación.En síntesis, el Círculo de Empresarios considera que "deben reformularse toda las medidas del marco regulatorio que discriminan por tamaño de empresas, ya sea haciendo referencia al número de empleados, cifra de facturación o volumen de activos. La existencia de estas medidas explican en parte la elevada concentración de empresas en segmentos de micro y pequeña".Javier Vega deSeoaneseñaló en el coloquio que "el fracaso forma parte del aprendizaje", en referencia a la vocación empresarial y a la crisis que han padecido numerosos empresas.