Lisboa, 6 dic.- Los futuros dueños de la gestora portuguesa de aeropuertos, ANA, en cuya privatización compiten la colombiana Odinsa y la argentina Corporación América, no podrán vender su posición en la compañía durante los próximos cinco años.
El Consejo de Ministros de Portugal anunció hoy la fijación de ese "período de no disponibilidad" al que quedarán sujetas las acciones de ANA, la compañía estatal responsable de las principales terminales aéreas lusas, Lisboa, Oporto, Faro y Azores.
El Gobierno portugués informó al término de la reunión ministerial que reservará, en el proceso de privatización, un 5 % del capital social de ANA para los trabajadores, que se beneficiarán además de un 5 % de descuento por acción respecto al precio de venta.
Junto a la empresa colombiana y la argentina, también compiten en la segunda fase de licitación de ANA los franceses de Vinci, los alemanes de Fraport y los suizos de Zúrich, que tienen hasta el 14 de diciembre para entregar sus propuestas finales.
El Gobierno luso exige, en las condiciones de licitación de ANA, que las empresas aspirantes operen o participen en la gestión de aeropuertos con tráfico superior a los diez millones de pasajeros y un volumen de negocio mayor de 400 millones de euros, así como capitales superiores a 2.000 millones.
La venta de ANA, por la que el Estado luso espera conseguir entre 1.600 y 2.500 millones de euros, está encuadrada en el programa de ajustes presupuestarios y reformas del sector público vinculado al rescate financiero que concedieron el año pasado a Portugal la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
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