El descalabro económico de Rusia sigue sin freno por culpa del petróleo‏

    • La economía rusa sufrió una contracción interanual de 4,3% en el tercer trimestre, según una estimación del gobierno divulgada el lunes, que muestra los efectos persistentes de la baja cotización del petróleo y de las sanciones occidentales.
    • El gobierno prevé una contracción del PIB de 3,9% para este año y un crecimiento de 0,7% en 2016
EEUU revisa dos décimas al alza el crecimiento del PIB en el segundo trimestre, hasta el 3,9%
EEUU revisa dos décimas al alza el crecimiento del PIB en el segundo trimestre, hasta el 3,9%

La economía rusa sufrió una contracción interanual de 4,3% en el tercer trimestre, según una estimación del gobierno divulgada el lunes, que muestra los efectos persistentes de la baja cotización del petróleo y de las sanciones occidentales.

Los datos, comunicados por el viceministro de Economía Alexei Vedev, muestran sin embargo que la contracción se fue reduciendo a lo largo del trimestre, pasando de 4,6% en agosto a 3,8% en septiembre. Las perspectivas del Ministerio de Finanzas rusos son las de un posible crecimiento de cara a la última fracción del año, para afrontar con un mayor optimismo el próximo ejercicio.

El derrumbe del mercado del petrolero y las sanciones decretadas contra Moscú por su política en Ucrania, sumieron a Rusia en la recesión a inicios de año. De modo que se experimentó una contracción del PIB de 2,2% en el primer trimestre y de 4,6% en segundo, respecto a los mismos periodos del pasado año. Sin embargo el gobierno prevé una contracción del PIB de 3,9% para este año y un crecimiento de 0,7% en 2016 - aunque S&P lo cifra en sólo un 0,3%-.La crisis de China daña a Moscú

Aunque la tensión en el aspecto internacional, motivada por la crisis en Ucrania, se ha visto reducida, la situación en Rusia todavía preocupa a los analistas. A esto, se unen cuestiones como el frenazo económico en China y la contracción de los precios del petróleo. El comercio entre Pekín y Moscú se ha visto reducido en más de un tercio.

De esta manera, estos datos se unen a las malas perspectivas que tienen las agencias de rating, que mantienen su calificación crediticia en BB+ (S&P) o BBB- (Fitch). Rusia tenía una gran solvencia financiera y no tiene casi deuda, sin embargo, el rápido descenso en sus ahorros pone en peligro su economía.

Algunas de las esperanzas por parte del Ejecutivo ruso pasarían por Siria. Y es que la intervención rusa en Siria podría llevar a una etapa de menor tensión con Occidente, siempre y cuando se alcance un acuerdo. Las agencias de rating apuestan, sin embargo, por el mantenimiento de las sanciones, aunque descartan su endurecimiento a corto plazo.

Y es que ante la caída de los precios de las materias primas y la crisis china, la recuperación de rusa pasa en buena medida por terreno diplomático. Putin deberá actuar con tacto en la cuestión siria, si no desea ver estrangulada su economía.

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