El Gobierno aprobará mañana el plan de competitividad para la economía

Madrid, 5 jun.- El Consejo de Ministros aprobará mañana el plan de medidas para el crecimiento, la competitividad y la eficiencia que pretende movilizar un total de 6.300 millones de euros.

Este plan fue anunciado por el jefe del Gobierno, Mariano Rajoy, en su intervención del pasado sábado en Sitges en la que clausuró la XXX reunión del Círculo de Economía.

De esa cantidad, 2.670 millones provendrán de la iniciativa privada y 3.630 millones del sector público, sin que ello suponga un aumento del gasto, según explicó Rajoy.

El plan contiene una serie de medidas que entrarán en vigor en el segundo semestre de este año y desarrolla una parte del Programa Nacional de Reformas de 2014 presentado a Bruselas.

Entre esas iniciativas se encuentran ayudas por importe cercano a los 750 millones de euros para la reindustrialización y una línea del Instituto de Crédito Oficial denominada Innovación Fondo Tecnológico y dotada con 325 millones.

España contribuirá también con 800 millones de euros a la iniciativa PYME de la Unión Europea, que tiene como objetivo aumentar el volumen de créditos a pequeñas y medianas empresas incorporando recursos conjuntos de los fondos europeos y del Banco Europeo de Inversiones.

Otro de los instrumentos del plan es la creación de un Fondo Nacional de Eficiencia Energética, que contará con una dotación de hasta 350 millones de euros anuales y que será cofinanciado con fondos europeos.

El Gobierno renovará el plan PIVE de ayudas a la compra de vehículos y pondrá en marcha el plan PIMA Aire 4 para automóviles comerciales, así como un programa de ayudas a la compra de vehículos eléctricos y un plan de renovación de la flota de vehículos pesados.

En materia de financiación, se impulsará la flexibilización de los convenios de acreedores con la reforma de la Ley Concursal y se favorecerá la actividad emprendedora mediante la simplificación de la normativa medioambiental y urbanística.

También incluirá medidas destinadas a mejorar la eficiencia del transporte por carretera y ferrocarril, a reforzar la competitividad de los puertos y a favorecer el desarrollo de las infraestructuras de recarga de vehículos eléctricos.