Después de haber escalado hasta el 1,5% en abril, al calor del impulso de los precios por la celebración de la Semana Santa, la tasa anual del Índice de Precios de Consumo (IPC) se desplomó hasta el 0,8% en el pasado mes de mayo, debido al abaratamiento de la electricidad y al menor encarecimiento de los carburantes respecto a hace un año, según el dato confirmado por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Estadística ha certificado así que, después del incremento de abril, cuando culminó la escalada que inició a principios de año, la inflación cayó siete décimas en tasa anual en mayo. Además de la electricidad, una vez finalizada la Semana Santa, el abaratamiento de los paquetes turísticos también tiró a la baja de los precios del ocio y la cultura, hasta marcar una caída del 1,2%. El INE también ha atribuido el descenso al hecho de que los carburantes y algunos alimentos, como las frutas, subieron menos el mes pasado de lo que lo hicieron en mayo de 2018.
Según el INE, entre los grupos que contribuyeron en mayo a la moderación de la tasa interanual del IPC también se encuentran la vivienda, que recortó más de dos puntos su tasa anual, hasta el -0,3%, por el menor coste de la electricidad; y el transporte, cuya tasa anual bajó casi 1,5 puntos, hasta el 1,8%, por el comportamiento de los carburantes y el abaratamiento del transporte aéreo de pasajeros.
En términos mensuales, el IPC avanzó un 0,2% en mayo, frente al incremento del 0,9% que experimentó en mayo de 2018. Este repunte se debe principalmente a los aumentos de precios del vestido y el calzado (+2,4%) por la temporada primavera-verano; del transporte (+0,5%) por las gasolinas, y de los alimentos (+0,4%), por el encarecimiento de las frutas y, en menor medida, de la carne, el pescado y el marisco. Por el contrario, el grupo de ocio y cultura recortó los precios en el mes un 1,5% por el abaratamiento de los paquetes turísticos, y la vivienda los rebajó en un 0,5% por el menor corte de la electricidad.
La tasa interanual de mayo es la trigésimo tercera tasa positiva que encadena el IPC interanual e implica que los precios son hoy un 0,8% superiores a los de hace un año. Con el dato de mayo, el IPC interanual pone fin a tres meses consecutivos de ascensos y vuelve a bajar del 1% por primera vez desde principios de 2018.
La inflación subyacente, que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos no elaborados, retrocedió dos décimas en mayo, hasta el 0,7%, con lo que se sitúa una décima por debajo del IPC general. En el quinto mes del año, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA), que sirve de referencia en el entorno europeo, situó su tasa anual en el 0,9%, siete décimas menos que en abril.
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