El mercado de la automoción en España continúa bajando marchas en su evolución. Desde que en septiembre se iniciara el descenso en las ventas totales (como consecuencia del efecto que produjo la entrada en vigor de la nueva normativa europea de emisiones), no ha hecho más que caer. Más aún con las nuevas medidas anunciadas desde el Gobierno, bien con la nueva fiscalidad que recaerá sobre el diésel, bien con las advertencias del fin del coche de combustión en un futuro a medio plazo.
Con este panorama de fondo, 2019 ha empezado con un ritmo igualmente decaído: las matriculaciones de turismos y todoterrenos nuevos en España en enero han bajado el 8% en comparación con el mismo mes de 2018, hasta totalizar 93.546 unidades, han informado este viernes las patronales de fabricantes Anfac, de concesionarios Faconauto y de vendedores Ganvam.
De hecho, si se observan las cifras por tipo de combustible, queda claro que el diésel se ha convertido en el nuevo enemigo habitual del comprador de coche y sus ventas se han derrumbado en más de un 36% respecto a enero de 2018. La gasolina, por su parte, compensa este paso atrás y logró matricular casi un 9% más de unidades. Con esta doble trayectoria, seis de cada diez coches (el 60% exacto) son de gasolina y los diésel apenas representan un 28%. No hace mucho tiempo, la proporción era exactamente la contraria.
Con enero son cinco los meses consecutivos a la baja que suma el mercado del automóvil en España, que en 2018 acumuló 1.321.438 unidades, el 7% más que un año antes, pero con ese descenso acelerado en el último tramo del ejercicio que ahora se vuelve a confirmar, según informa Efe.
Por canales de venta, no hay ninguna excepción que se pueda salvar del frenazo general: el mes pasado el de particulares descendió el 9,6%, hasta las 47.244 unidades; el de empresas el 5,5%, hasta 31.374; y el de alquiladoras el 8%, hasta 14.928.
En cuanto a los modelos más vendidos, el Dacia Sandero ha dado la sorpresa en enero y ha adelantado a dos habituales en los primeros puestos como son el Seat León y el Seat Ibiza, segundo y tercero, respectivamente. Seat, eso sí, se mantiene como marca más vendida, seguida por Peugeot y Volkswagen.
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