Con hasta media hora de retraso, ha aparecido a última hora de esta mañana el nuevo hombre que guiará la agenda económica de Génova. Así, y tras la segunda reunión del Comité Nacional, Juan Bravo ha asegurado que han dedicado la gran parte de la mañana a tratar el plan fiscal que Feijóo envió al presidente Sánchez. Un documento que ha definido de "transversal" y que considera que "decirle no, es decirle no a los españoles". Por otro lado, Bravo ha fiado el 'Sí' o la abstención al gran decreto de Sánchez a una nueva reunión antes del jueves (día en que se vota el decreto) donde se pueda abordar las medidas que el nuevo líder de los populares propuso al presidente Sánchez.
El hombre que se ha encargado de dirigir el plan fiscal de Feijóo ha asegurado que su plan "va dirigido a las rentas medias y bajas y los pensionistas. Hemos pedido que lo estudie, pero de momento solo hemos conseguido silencio o desprecio. ¿No hay una sola propuesta que se pueda asumir? El Gobierno ha tenido tiempo para reunirse con Esquerra Republicana, pero no para estudiar el documento. ¿Qué tiene mas importante en la agenda que solucionar la situación económica del país?".
Bravo ha querido recalcar el difícil escenario que maneja España con su deuda y déficit. Por otro lado, ha arremetido contra la compleja situación económica del país. "El Gobierno debe dejarse ayudar. Esta semana se revisa el cuadro macroeconómico que se basó sobre parámetros erróneos". "Nuestras medidas serán buenas para la sociedad y la economía española. Nosotros seguiremos esperando hasta el jueves. Vamos a confiar en que vamos a tener la oportunidad para trasladar lo que creemos que es bueno. Y conforme a esa actuación, tomaremos una decisión", ha apuntado.
El plan fiscal de Feijóo contempla una bajada de impuestos de forma selectiva y temporal a rentas bajas y medias, ayudas directas a las empresas y a los sectores afectados, una mejora de la eficiencia en la calidad del gasto público y, por último, plantea destinar el 7% de los fondos europeos a un paquete que financie incentivos fiscales y, de esta forma, canalizar unos fondos que -desde el PP- aseguran que no están llegando.
En concreto, el PP quiere hacer llevar a cabo cambios en el IRPF, deflactando la tarifa, subiendo el mínimo personal y familiar y ajustando las retenciones. Por otro lado, piden una reducción de la tributación en el IRPF de los módulos de régimen simplificado del IVA y régimen especial en aquellos sectores más afectados por los costes energéticos. También buscan acometer reformas en el impuesto de Sociedades -con incentivos fiscales- y el IVA y los impuestos especiales. Otra de los grandes objetivos del nuevo PP es la eficiencia en el gasto público, donde piden potenciar la AIREF y reducir ministerios y altos cargos.
Esta misma mañana el portavoz de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE, Felipe Sicilia, ha asegurado que "el plan económico presentado por el PP se define con dos palabras: populismo fiscal. Es un plan que busca recortar el Estado del Bienestar". Una afirmación que la ha sustentado con lo relatado estos últimos días por el Fondo Monetario Internacional y el comisario europeo de Economía.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios