El sindicato de controladores dice que AENA quiere eliminar el actual convenio

  • Madrid.- Las negociaciones del segundo convenio de los controladores aéreos están bloqueadas por la "arrogancia" de AENA, que "no ha movido su postura y quiere eliminar por completo el texto actual", según la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), que pide que "cese en el acoso y presión al colectivo".

Madrid.- Las negociaciones del segundo convenio de los controladores aéreos están bloqueadas por la "arrogancia" de AENA, que "no ha movido su postura y quiere eliminar por completo el texto actual", según la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), que pide que "cese en el acoso y presión al colectivo".

Según un portavoz de USCA, la pretensión de AENA es "llevarse por delante el actual convenio, firmado hace diez años, y rehacerlo a su criterio", un marco que el sindicato no contempla, ya que, además del respeto al texto actual, pide que se "actualicen los compromisos alcanzados con la empresa".

El sindicato, que representa a los 2.400 controladores españoles, ha asegurado que está dispuesto a asumir ajustes económicos para rebajar los costes, pero se niega a ser "el chivo expiatorio".

AENA ha recordado que el presidente del ente público, Juan Lema ha manifestado hoy en el Senado que los salarios de los controladores (unos 350.000 euros medios anuales) suponen un 70% de los costes totales de la navegación, lo que les sitúa entre los más altos de Europa y de los menos productivos.

Un aspecto que rechaza USCA, que asegura que los sueldos del colectivo no son responsables de la deuda de AENA, que terminará 2010 con un déficit de más de 12.000 millones de euros, por la "política de grandes inversiones realizada".

Además, los representantes de los controladores piden que si se efectúan ajustes en sus condiciones salariales, "se reduzcan las asistencias técnicas y las subvenciones indirectas que se pagan por determinados servicios", entre otros.

USCA también demanda que se cambie el marco normativo que "delega la autoridad en el prestador del servicio (AENA) y que pase a depender de un organismo externo, al que el ente público tenga que rendir cuentas y le impida emitir continuas directivas que pretenden convertir en normas".

Para avanzar en las negociaciones del nuevo convenio colectivo USCA requiere también a AENA que "cese en el acoso y la presión que ejerce sobre el colectivo".

En este sentido, ha advertido de que los trabajadores "están muy hartos" y han acogido "muy mal" la decisión "sin sentido" de la empresa de tener que fichar a partir del próximo 1 de diciembre.

"Es absurdo, éste es uno de los colectivos con menor absentismo y además tenemos que firmar a la entrada del servicio, hecho que verifica un supervisor o un jefe de sala, que sabe perfectamente si estamos en el puesto", señaló el portavoz, que denunció que la empresa se "niega a dar permisos sin explicación".

USCA ha desmentido que haya ordenado a sus afiliados que no acepten ninguna ampliación de jornada, ni el traslado de turnos de servicio y ha destacado que en "un clima tenso como el actual, la gente no colabora".

Ha recordado que AENA, en su política de reducción de gastos, no demanda últimamente a los controladores que hagan horas extras, ni cubre las bajas ni las faltas y reorganiza los sectores aéreos y las posiciones de trabajo a su antojo.

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