La crisis sanitaria está perjudicando gravemente a la economía. Muchas empresas están paralizadas y han optado por realizar expedientes de regulación de empleo para tratar de mitigar el impacto negativo que les va a suponer el cierre del negocio durante el estado de alarma. Sin embargo, hay sectores que continúan su actividad pese a las circunstancias.
Es el caso de los empleados teleoperadores, una labor que tiene actualmente debido a la crisis sanitaria una gran oferta de puestos de trabajo. Tanto es así que la empresa tecnológica Indra que a través de la empresa temporal Manpower buscaba en los últimos días 250 teleoperadores para reforzar el servicio de atención de la Comunidad de Madrid relacionado con el COVID-19.
Esta oferta de trabajo (real) se compartió a través de Whatsapp y exigía disponibilidad de lunes a domingos en turnos rotativos de mañana, tarde y noche con un máximo de 8 horas diarias. El salario bruto por hora está cifrado en 7,39€ y 8,86€ si el horario es nocturno.
Según el portal Indeed, la media salarial para España es de 999€, aunque hay diferencia entre las distintas compañías del sector. Por ejemplo, Konecta, la mayor empresa de telemarketing en España, el promedio supera los 1.500 euros. Una media anual en este sector que Adecco sitúa en los 15.553€ brutos.
Aunque, los teleoperadores no son los únicos se exponen al virus al acudir a su puesto de trabajo. El personal de limpieza y de cuidado de personas dependientes son otros empleos que continúan y que, además, reciben parte de su retribución en negro, es decir, que no se declara.
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