El verano calienta la buena marcha del mercado laboral, pero trae algún nubarrón

El desempleo ha vuelto a descender en julio en nuestro país, al calor de la temporada alta turística, lo que siempre supone una buena noticia a pesar de que el número de parados en España siga estando aún por encima de los 4 millones, según los datos de los servicios públicos de empleo.

No obstante, los seis meses consecutivos de retrocesos del paro registrado que se acumulan tras el balance del pasado mes de julio acerca ya el número de desocupados a esa barrera de los 4 millones, para dejarla exactamente en 4.046.276.

Además, la mejora del desempleo ha sido más intensa en este mes de julio que en los años precedentes. Es de destacar que el número de parados registrados que ha abandonado las listas del antiguo INEM es la mayor en un mes de julio desde 1998: ha disminuido en 74.028 desempleados (-1,8%), más del doble que la registrada en el mismo mes de 2014, cuando descendió en 29.841 desempleados. En los ocho últimos años, los desocupados habían disminuido en una media de 37.000 personas en julio, la mitad que la registrada este año.

Julio es tradicionalmente un buen mes para el trabajo en nuestro país. Estamos en la mejor época del año para un mercado laboral como el español, muy estacional por el gran peso de actividades como el turismo y la hostelería.Baja ligeramente el ritmo de creación de empleo

También es una buena noticia que se haya vuelto a crear empleo un mes más. La ganancia de afiliados a la Seguridad Social en julio ha sido de 58.792 cotizantes (+0,34%), apuntalándose el número total de ocupados por encima de los 17 millones y caminando ya hacia los 17,5 millones.

El número medio de trabajadores de alta en la Seguridad Social se ha situado el mes pasado en 17.315.188. Esta mejora del número de cotizantes en julio ha sido mayor que la que se había producido en junio, cuando se ganaron 35.085 afiliados (+0,20%).

Sin embargo, ha sido menos intensa que la que se registró en el mismo mes de 2014, cuando se sumaron 62.108 afiliados. Una pequeña diferencia de tan sólo 3.316. Pero lo más significativo es que se trata del segundo mes consecutivo en el que la creación de empleo en 2015 se sitúa por debajo de la generación de nuevos puestos de trabajo en 2014. Ya ocurrió en el mes de junio, cuando se ganaron 35.085 cotizantes, por los 56.622 que se habían sumado en 2014.

En el saldo conjunto de estos dos primeros meses de temporada veraniega, en 2014 se crearon 118.730 puestos de trabajo, mientras que en 2015 han sido 94.057. Es decir, este año 24.673 menos que en el pasado ejercicio. Un toque de atención sobre el ritmo de creación de empleo que obliga a seguir poniendo toda la carne en el asador y no echar las campanas al vuelo.

¿Por qué se ralentiza aunque sea ligeramente la creación de empleo cuando todos los indicadores económicos, incluidos los datos de paro registrado, son positivos y venían superándose mes a mes desde hace tiempo? Según los economistas es pronto aún para hablar de una desaceleración en la generación de puestos de trabajo o para extraer conclusiones sobre las posibles causas.

Algunos señalan que el altísimo ritmo de creación de empleo de los meses precedentes era difícilmente sostenible y a medida que la recuperación del mercado laboral se consolidase, lo normal sería que el ritmo de mejora de la ocupación fuera algo menos intensa mes a mes pero más sostenida.

En la última Encuesta de Población Activa (EPA), correspondiente al segundo trimestre de este año y conocida hace algo menos de dos semanas, los resultados también fueron positivos, pero algo menos de lo que se había previsto. Hay que esperar no obstante, señalan los economistas consultados, para comprobar si se trata de un cierto enfriamiento o tan sólo son pequeñas variaciones normales cuando se manejan estadísticas.

No obstante, así las cosas, hay quien puede comenzar a pensar que estamos en un periodo de espera en el que inversores y empresarios retrasan decisiones de inversión mientras no se conozca el nuevo mapa político en nuestro país tras las elecciones generales que se celebrarán probablemente a finales de año, y debido a la inestabilidad creada por el conflicto en Cataluña con los comicios del mes de septiembre en el horizonte próximo.Muy buen balance interanual

En términos interanuales, es decir, en comparación con julio del año anterior, la caída del desempleo es de 373.584 parados (-8,45%), un porcentaje mayor al del mes de junio, cuando fue del -7,4%. Se corrige así el resultado interanual de junio, que había sido peor que en los dos meses precedentes de abril y mayo.

Y se encadenan ya casi dos años, exactamente 22 meses consecutivos, de descensos interanuales del paro. Además, la del mes de julio es la mayor caída interanual del desempleo de la serie histórica comparable (desde 1996).

Desde que se alcanzó la cota máxima del paro en nuestro país, cuando en febrero de 2013 superó los 5 millones de personas (5.040.222), el número de desempleados ha retrocedido ya en prácticamente un millón de personas en 29 meses (-993.946).

Por su parte, el aumento de afiliados a la Seguridad Social en un año es de 568.085, lo que supone un crecimiento interanual del +3,39%. Este incremento interanual de cotizantes acumula 18 meses consecutivos al alza y supone un buen balance en los últimos 12 meses, cercano ya a la creación de 600.00 nuevos empleos prevista para el conjunto de 2015. Pero está ligeramente por debajo de la marcada en el mes de junio, cuando fue de 571.400 afiliados (+3,42%).

Desde su peor momento, también en febrero de 2013 cuando el número de cotizantes se redujo hasta 16.150.747, el sistema ha ganado más de 1,1 millones de afiliados en 2 años y 5 meses. Exactamente, hay 1.164.441 cotizantes más en el sistema que en aquella fecha.Resultados positivos sin el 'efecto calendario'

Una parte, sin duda, de estos datos positivos para la evolución del trabajo en nuestro país se debe a la inminente campaña turística veraniega. Por eso es conveniente tener en cuenta también los resultados desestacionalizados. Es decir, sin tener en cuenta el denominado efecto calendario. Y en este sentido, también son positivos.

El paro registrado disminuyó el mes pasado en términos desestacionalizados en 44.286 personas. Mientras que la Seguridad Social ha ganado 10.499 afiliados de forma desestacionalizada. Recupera así la creación de empleo desestacionalizado el signo positivo que mantenía de forma ininterrumpida desde el verano de 2013 y que se había visto interrumpida el pasado mes de junio.

Unos resultados muy positivos para la evolución del paro en nuestro país, aunque hay alguna señal de advertencia sobre el alto ritmo de creación de empleo que se había logrado en la primera mitad del año.

No se trata aún de correcciones graves, tan sólo de pequeñas reducciones en la intensidad de generación de nuevos puestos de trabajo. Pero debe servir para no desatar la euforia, para seguir poniendo toda la carne en el asador en la recuperación del tocado mercado laboral y para no dormirse en los laureles y seguir traduciendo la mejora económica en mayores oportunidades de trabajo.

Hay que esperar, con optimismo pero también con cautela, a la evolución de los indicadores en los próximos meses para extraer mayores conclusiones.