Elena Salgado asegura que "el sector público es modélico" en materia de igualdad

  • Madrid.- Elena Salgado, nacida en Orense en 1949, tiene todas las papeletas para pasar a la historia de la política española: es la primera mujer que se pone al frente del Ministerio de Economía, uno de los más emblemáticos, y lo hace durante la mayor crisis económica desde la Gran Depresión de 1929.

Salgado dice que no hay emergencia, pero que hay que hacer un plan de ajuste
Salgado dice que no hay emergencia, pero que hay que hacer un plan de ajuste

Madrid.- Elena Salgado, nacida en Orense en 1949, tiene todas las papeletas para pasar a la historia de la política española: es la primera mujer que se pone al frente del Ministerio de Economía, uno de los más emblemáticos, y lo hace durante la mayor crisis económica desde la Gran Depresión de 1929.

Con una larga trayectoria en la Administración y cargos relevantes en la empresa privada -fue consejera delegada de Vallehermoso Telecom-, Salgado no duda en afirmar que, en materia de igualdad entre hombres y mujeres, el sector público va muy por delante del privado.

"Creo que el sector público, en este sentido, es modélico", recalca, en declaraciones a EFE, la titular de Economía, que ocupó previamente las carteras de Sanidad y Administraciones Públicas.

Salgado inaugura una serie de entrevistas dedicadas a mujeres emprendedoras en el ámbito económico, un ecosistema en el que tradicionalmente el hombre ha gozado de un papel preponderante, y centradas en el largo camino hacia la igualdad efectiva.

P: ¿Qué supone formar parte de este Gobierno que ha apostado por la paridad, que cuenta con un Ministerio de Igualdad y que ha encargado la cartera de Economía, clave en la actual situación, a una mujer?

R: Desde luego es un reto personal y también un reto colectivo. Yo creo que el hecho de que sea un Gobierno paritario y el hecho, además, de que dos de las tres vicepresidencias estén ocupadas por mujeres (María Teresa Fernández de la Vega y Elena Salgado) es una gran responsabilidad y también una gran satisfacción.

P: ¿Han cambiado mucho las cosas en materia de igualdad desde que inició su carrera profesional?

R: Han cambiado bastante, pero yo diría que no lo suficiente. Y las barreras que quedan por superar son, en buena parte, barreras que se refieren sobre todo a la cooptación. Por ejemplo, la presencia de mujeres en los consejos de administración. Ahí hay que hacer discriminación porque, en caso contrario, sorprendentemente para mí, cada vez que los hombres comienzan a poner nombres sobre la mesa siempre son nombres de varones.

P: ¿En qué ámbito hay que trabajar más en materia de igualdad? ¿En el sector privado o en el público?

R: Sin ninguna duda en el sector privado. Absolutamente sin ninguna duda. Creo que el sector público es modélico en ese sentido.

P: ¿Qué tareas debe abordar el Gobierno para avanzar en el terreno de la igualdad?

R: Insistir en el cumplimiento de la Ley de Igualdad. Cumplirla nosotros como Administración en primer lugar. No siempre es fácil, porque la historia profesional de las mujeres en nuestro país ha sido una historia complicada. Por eso, hay que hacer esfuerzos decididos para que eso se lleve a la práctica, y luchar también por la conciliación. Trabajar por la conciliación de horarios y también por la conciliación de mentalidades entre hombres y mujeres.

P: En su larga trayectoria profesional ¿recuerda algún momento en el que fuera consciente de superar algún límite, alguna barrera impuesta hasta ese momento a las mujeres?

R: Pues la verdad es que un límite que no fui consciente de superar es que, cuando estaba en el consejo de administración de (la empresa minera) Hunosa, era la única mujer. Pero mucho más importante todavía fue el primer día que una mujer bajó a la mina. Los comentarios que eso suscitó, incluso entre mis compañeros de consejo varones, me hicieron ver que ese día esa mujer había hecho algo importante.

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