No todos los días no son récord en Wall Street, pero casi

  • No pudo ser, pero por poquísimo. El Dow Jones, acostumbrado ya a seis récords seguidos, se quedó a un 0,01 % de otra plusmarca, en una jornada bursátil prácticamente estática en el que solo Twitter destacó, y para mal, con su primer gran desplome desde que salió a los mercados en noviembre.

Mateo Sancho Cardiel

Nueva York, 27 dic.- No pudo ser, pero por poquísimo. El Dow Jones, acostumbrado ya a seis récords seguidos, se quedó a un 0,01 % de otra plusmarca, en una jornada bursátil prácticamente estática en el que solo Twitter destacó, y para mal, con su primer gran desplome desde que salió a los mercados en noviembre.

Por supuesto, este descenso en el índice de referencia del parqué neoyorquino no preocupó a nadie, pues dadas las cifras que se manejan en este fin de año muy caliente en términos bursátiles, mantener prácticamente intactos los niveles del día anterior sigue siendo un estupendo resultado.

De hecho, si bien hoy puede considerarse un respiro por parte de los inversores (el selectivo S&P 500 también bajó un imperceptible 0,03 % y se quedó sin su récord número 45 en 2013), el cómputo semanal fue más que positivo, marcando la segunda semana de avances en Wall Street.

El estatismo era, además, reflejo de una jornada económica en la que no hubo ningún dato macroeconómico relevante que inclinara más claramente las balanzas hacia las pérdidas o las ganancias, lo que hizo que los índices estuvieran coqueteando por igual con números verdes y rojos. Abrieron con los primeros y cerraron con los segundos.

Más animada estaba la jornada en el mercado del petróleo, pues el barril de crudo de Texas volvía a cotizar por encima de los 100 dólares, algo que no conseguía desde el 18 de octubre, de la misma manera que en el mercado de divisas el euro alcanzó su máximo nivel frente al dólar en dos años.

En clave empresarial, Twitter pinchaba después de su espectacular escalada desde que debutó en bolsa en noviembre. La carrera generada por una red social de gran popularidad pero dudoso rendimiento económico había tenido en vilo a los analistas, que veían cómo su actuación bursátil apreciaba las acciones un 180 % en menos de dos meses. Hoy, en cambio, se desplomó más de un 13 % y se convertía, por eliminación, en la empresa protagonista del día.

Tampoco era un buen día para General Motors, que bajó el 1,40 % después de que su empresa conjunta en China llamara a revisión a cerca de 1,5 millones de vehículos por un posible problema en la sujeción de la bomba de combustible.

Finalmente, la empresa con buenas noticias en el último viernes del año fueron para la firma aeronáutica Textron, que progresó el 1,13 % en la Bolsa de Nueva York (NYSE) después de anunciar un acuerdo para la compra del fabricante de aviones militares Beechcraft por unos 1.400 millones de dólares.

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