España, a la vanguardia internacional en prevención del blanqueo de capitales

  • El Gobierno ha aprobado hoy el reglamento de desarrollo de la Ley de prevención del blanqueo de capitales y para la financiación del terrorismo, que sitúa a la regulación nacional en esta materia "a la vanguardia internacional".

Madrid, 30 abr.- El Gobierno ha aprobado hoy el reglamento de desarrollo de la Ley de prevención del blanqueo de capitales y para la financiación del terrorismo, que sitúa a la regulación nacional en esta materia "a la vanguardia internacional".

El Consejo de Ministros ha decidido incorporar las últimas recomendaciones sobre los estándares internacionales en la lucha contra el blanqueo hechas por el Grupo de Acción Financiera (GAFI) en febrero de 2012.

En la reseña, el Gobierno recuerda que estas recomendaciones no han sido incorporadas todavía en una directiva comunitaria, pero España ha decidido adelantar su aplicación.

Además, con esta nueva regulación se pretende incrementar la eficacia del modelo de prevención incorporando un enfoque orientado al riesgo exigible tanto para el sector público como privado.

La ley de 2010 es una norma que recoge las más novedosas exigencias internacionales en materia de prevención del blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo, y en 2013 se hicieron modificaciones como la incorporación de nuevos requerimientos, en particular en relación con las personas con responsabilidad pública.

El reglamento concreta algunas obligaciones como el conocimiento e identificación de clientes, comunicación al Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias (Sepblac )de operaciones sospechosas, y dotación de los medios humanos y materiales necesarios para dar cumplimiento a estas obligaciones, que deberán ser sometidas a un auditor externo.

Además, el reglamento aprobado hoy concreta y desarrolla el concepto del enfoque de riesgo establecido en la ley para concentrar los esfuerzos de control en aquellos clientes, operaciones o productos que presentan más riesgos.

Por último, refuerza los órganos de representación institucional para dar cabida a nuevas parcelas de actividad.

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