Lo bueno, lo feo y lo malo de la era Zapatero

  • Para unos ha sido el 'presidente del paro' porque se marcha con casi cinco millones de desempleados. Pero muchos olvidan que en su primera legislatura la tasa de paro fue la más baja de la democracia. Quiso hacer de lo social su bandera, pero en mayo de 2010 se vio obligado a dar la vuelta a su programa electoral. Retiró las tropas de Irak, pero las mantuvo en Afganistán y nos hizo participar en la guerra Libia. Éste es el legado que deja Zapatero.
Zapatero anuncia el fin de su legislatura
Zapatero anuncia el fin de su legislatura
EFE
B. Toribio / A. Medina / C. Ibáñez

Han sido siete años en La Moncloa. Si la primera legislatura de José Luis Rodríguez Zapatero estuvo marcada por el diálogo y las reformas sociales, en la segunda dio la vuelta a su programa electoral:

1. LO BUENO …

- El fin de ETA. La banda terrorista anuncia el 20 de octubre el cese definitivo de su actividad armada. "Durante muchos años hemos sufrido y combatido el terror, lo hemos hecho hasta lograr que la razón democrática se abra camino de un modo definitivo", afirmaba Zapatero ese día. "La nuestra será una democracia sin terrorismo pero no sin memoria".

-  Política social. Zapatero quiso pasar a la historia como el presidente 'más social'. Y será recordado por medidas como el 'cheque- bebé', la mejora de las becas y el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) o por mejorar la ley de extranjería, entre otras. El problema es que muchas de estas promesas se quedaron a la mitad: por ejemplo, el SMI no se subió hasta los 800 euros como prometió o se suprimió el 'cheque-bebé' por imperativo del déficit.

- Un presidente con talante. Algo que ha caracterizado a Zapatero desde que llegó a La Moncloa es su talante dialogante, sobre todo en la primera legislatura. Casi siempre ha buscado el pacto con otras formaciones políticas y el diálogo con los sindicatos, si bien en ambos casos ha tenido serios encontronazos.

- La tasa de paro más baja de la democracia. Aunque Zapatero cerrará su gestión con casi un 21% de paro, su Gobierno firmó la tasa de paro más baja de la democracia, un 7,95% de desempleo en el segundo trimestre de 2007, según la Encuesta de Población Activa el INE. Gracias a esta cifra, el presidente llegó a pronosticar el pleno empleo técnico. La crisis le dio de lleno en 2008.

- Más mujeres en política. Zapatero ha sido el primer presidente de España que ha tenido un Gobierno paritario, dos vicepresidentas primeras (María Teresa Fernández de la Vega y Elena Salgado) y una ministra de Defensa.

- Adiós a Irak.  Casi ha quedado en el olvido, que nada más llegar al Gobierno el aún hoy presidente sacó a las tropas españolas de este país árabe. Aunque sí las mantuvo en Afganistán e hizo que participaran en la guerra de Libia. Para justificarlo, Zapatero siempre se ha agarrado a que la comunidad internacional sí respaldó la intervención en estos dos últimos conflictos.

2. LO POLÉMICO

Los siete años del Gobierno Zapatero también han dejado en el camino una serie de reformas polémicas, declaraciones desafortunadas o iniciativas que han pasado desapercibidas.

- Ley del Aborto y matrimonio de los homosexuales. Estas dos iniciativas han sido muy alabadas por una parte de la sociedad y de los medios de comunicación, mientras que otros lo han criticado hasta la saciedad. Para la izquierda son dos iniciativas "históricas", mientras que para el PP eran innecesarias e inconstitucionales.

- Ley de Memoria Histórica. Sus intenciones de reconocer y ampliar los derechos a las víctimas de la Guerra Civil con esta ley levantó serias ampollas porque resucitó el fantasma de las 'dos Españas'.

- Estatut de Catalunya. Ha sido una de las grandes polémicas políticas a las que ha tenido que hacer frente Zapatero. Su aprobación en el Congreso provocó la división de su partido con enfrentamientos públicos entre los socialistas catalanes y los de otras autonomías como los extremeños. A esto hay que sumar el largo proceso judicial abierto en el Tribunal Constitucional y las consecuencias que ha tenido en este órgano judicial con la no renovación de sus cargos caducos.

- Alianza de las Civilizaciones.  Este proyecto que Zapatero patrocinó junto al primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, para promover la alianza entre Occidente y el mundo árabe para combatir el terrorismo ha pasado desapercibido en el panorama internacional y no ha tenido ningún papel pese a los conflictos que se han vivido en los últimos años.

- Ruptura de la tregua con ETA.  "Estamos mejor que hace un año pero dentro de un año estaremos mejor". Un día después de que Zapatero pronunciara esa frase, la banda terrorista atentaba en la T4 de Barajas asesinando a dos personas. Fue el fin de la tregua con ETA, que dejó en evidencia al presidente.

- El tijeretezo. La presión sobre España se volvió insostenible por primera vez (luego han venido muchas más) en mayo de 2010, cuando Grecia entró en barrena. Tras muchas dudas y críticas, Zapatero adoptó una serie de medidas contundentes que debían ahorrar 15.000 millones de euros y que incluía recortes a los funcionarios, congelación de las pensiones y freno a las inversiones. Aunque estaba claro que había que tomar medidas, más de una vez se ha considerado que fueron insuficientes o erróneas.

- Reforma de pensiones. Si sólo se atendiera a su impacto social, la reforma de las pensiones debería incluirse entre el legado malo de Zapatero. No obstante, también era una medida que todos los expertos reclamaban hace años y que ha sido finalmente respaldada en el Congreso. ¿Su contenido? Ampliar la edad de jubilación a los 67 años.

3.LO MALO

Y por últimos son muchas las decisiones que ensombrecen su legado, sobre todo desde el punto de vista económico.

- Negar la crisis. Hasta julio de 2008 no reconoció que España estaba en crisis. Este retraso en admitir que el país atravesaba una recesión es una de las cosas que más se le ha echado en cara en esta legislatura.

- Más parados que nunca en la historia. La tasa de paro casi se ha multiplicado por tres en los últimos cuatro años: desde ese 7,95% hasta superar el 21%. La cifra total de afectados ha rozado los 5 millones y la EPA recién publicada del segundo trimestre de 2011 deja la cifra actual en 4,8 millones. El paro juvenil, según la Organización Internacional del Trabajo, es la más elevada del mundo occidental.

- Crisis en los mercados. En los últimos meses, la diferencia entre el bono español y el alemán alcanzó máximos históricos, llegando a los mismos niveles que forzaron en su día los rescates de Grecia, Irlanda y Portugal.

- Una recesión de caballo y un déficit por las nubes. España entró en recesión en 2008 y la situación se deterioró por completo en 2009, cuando el paso atrás fue del 3,7%. Ya en 2010 la economía se contrajo una sola décima mientras que para 2011 se espera un tímido avance del 1%. Un dato: mientras España no crezca por encima del 2% será incapaz de crear empleo.

Y las cuentas del Estado están peor que nunca. En 2009 el déficit de España superó el 11% del PIB, fue el cuarto más elevado de la Unión Europea. Ya en 2010 se redujo la cifra al 9,2% del PIB y el objetivo de este año es bajar al 6%.

- Una huelga general que no esperaba. Zapatero quería pasar a la Historia como el primer presidente del Gobierno que no había sufrido un paro general. Fue el 29 de septiembre de 2010 y, pese a los esfuerzos de los sindicatos, resultó más descafeinada de lo esperado. Las centrales sindicales decidieron convocar un paro generalizado en todo el país como respuesta a la reforma laboral de la primavera anterior, donde se recogía, entre otras cosas, la posibilidad de un despido vinculado a la crisis.

- Corrupción política. Aunque no solo ha afectado a su partido, el caso Faisán, el caso de los EREs de Andalucía o el caso Pretoria son algunas de las operaciones que están investigando posibles delitos entre políticos socialistas. Esta lacra también ha dado de lleno a otros partidos como PP, CiU o Unió Mallorquina entre otros.

- La sociedad, indignada. Al final de su legislatura, el CIS refleja el hastío que tienen los españoles hacia la clase política, que es considerada el tercer problema del país. La gestión de la crisis económica, las reformas y los continuos enfrentamientos entre el Gobierno y la oposición han acabado hartando a los ciudadanos que salieron a la calle para gritar "no nos representan".

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