Renault lo considera una investigación rutinaria, pero sus sedes han sido han sido registradas ante las sospechas de que podría haber trucado sus motores como en su día hizo Volkswagen.
Las acciones de la marca automovilística se han desplomado cerca de un 20 por ciento su mayor caída desde 1999, quedándose finalmente en una caída del 10,28% al cierre de la jornada en la bolsa de París, este jueves después de que se conociera que varias de sus sedes estaban siendo investigadas por supuestos fraudes vinculados al caso Volkswagen.
El sindicato CGT, el más importante del país, ha sido el encargado de informar de que agentes de la Dirección General de la Competencia, del Consumo y de la Represión del Fraude del Ministerio de Economía habrían investigado los departamentos de "homologación y puesta a punto de los controles del motor".
Fuentes sindicales anunciaron este jueves que los servicios franceses de represión del fraude (DGCCRF) registraron la semana pasada varias sedes de Renault en la región de París."Agentes de la DGCCRF intervinieron en varias sedes de Renault el pasado jueves", según una octavilla del sindicato CGT de un centro de ingeniería en Lardy, una localidad al sur de París.Ordenadores de directivos, requisados
Según este sindicato, el más importante de la compañía, los registros "están relacionados con las consecuencias del caso de motores trucados de Volkswagen".Además, los investigadores habrían requisado los ordenadores de varios de los directivos, según el sindicato CGT, que ha señalado que los registros y las pesquisas se llevaron a cabo en el centro de Guyancourt (Yvelines), el de Plessis-Robinson y la sede de Boulogne-Billancourt (Altos del Sena). Mientras que la empresa solo menciona la sede de Guyancourt.La empresa niega cualquier fraude
Por su parte la empresa automovilística niega cualquier relación con los fraudes de emisión de Volkswagen.Renault asegura que las autoridades galas están realizando pruebas en vehículos de diferentes marcas del país, entre las que se encuentra Renault, y afirma que durante el proceso no se ha detectado ningún dispositivo manipulador de emisiones.
La marca afirma que se trata de unas investigaciones rutinarias por parte las autoridades galas tras el escándalo en la gigante automovilística. En concreto, la empresa señala mediante un comunicado quelas autoridades galasrealizarán pruebas a cien vehículos en el país, entre los que se encuentran 25 unidades de Renault (debido a su cuota de mercado en el país).
Sea como fuere lo cierto es que el rumor ha sembrado el caos en la bolsa y ha producido que la firma francesa haya registrado el peor dato en doce años.
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