Francia sigue el camino de Alemania. La segunda economía europea por tamaño ha visto cómo su PIB se contraía un 0,1% entre enero y marzo, confirmando la entrada del país en recesión al encadenar dos trimestres consecutivos a la baja. La actividad gala ya retrocedió un 1,5% entre octubre y diciembre del año pasado. El dato lo ha hecho público este mismo viernes el Instituto Nacional de Estadística de Francia (Insee).
Ese 0,1% supone una revisión notable de la estimación previa que había hecho el Insee. El organismo anunció, de hecho, el pasado 30 de marzo que la economía vecina había registrado una expansión del 0,4% en el primer trimestre. En relación al cuarto trimestre de 2019, el último completo antes de la pandemia, la economía francesa todavía se sitúa un 4,7% por debajo. En los tres primeros meses de 2021, el consumo de los hogares registró un incremento del 0,1%, después de bajar un 5,6% en el cuarto trimestre de 2020, aunque se mantiene un 6,8% por debajo del nivel precrisis.
De su lado, la formación bruta de capital fijo (inversión) aumentó un 0,2% en el trimestre, después de haber subido un 1,7% entre octubre y diciembre de 2020, acercándose así al nivel anterior a la pandemia, del que todavía lo separan 2,3 puntos porcentuales.
"La estimación para el primer trimestre de 2021 se revisa en -0,5 puntos, debido principalmente a la inclusión de datos sobre la construcción, que es mucho menos dinámica que las extrapolaciones utilizadas en el informe anterior", apunta el Instituto en su informe. Así, las extrapolaciones utilizadas en la primera estimación preveían un alza de la formación bruta de capital fijo en la construcción en el primer trimestre del +5,1% frente al +0,6% que se ha registrado finalmente.
Asimismo, las importaciones aumentaron un 1,1% en el primer trimestre, después del incremento del 2,2% en los tres meses anteriores, mientras que las exportaciones retrocedieron dos décimas, tras subir un 4,9% en el cuarto trimestre de 2020.
El retraso en el inicio de la vacunación por parte de los socios europeos está lastrando su recuperación en el arranque del ejercicio, puesto que obligó a mantener e incluso ampliar las restricciones para hacer frente al avance de los contagios, sobre todo ante el surgimiento de las nuevas olas del virus.
