Funeral por las víctimas del accidente de autobús en Portugal

Lisboa, 29 ene.- Centenares de familiares, amigos y vecinos de las once víctimas mortales del accidente de autocar del pasado domingo en Portugal llenaron hoy la Catedral de la pequeña ciudad de Portalegre en un emotivo funeral en memoria de los fallecidos.

El acto fue presidido por el obispo de la Diócesis de Portalegre y Castelo Branco, Antonino Dias, y contó con la presencia de autoridades lusas y del delegado del Gobierno en Extremadura, Germán López Iglesias, que se desplazó a Portugal para asistir al sepelio.

El siniestro se produjo cuando un autobús alquilado a la empresa extremeña "Autocares Rabazo", en el que viajaban 44 pasajeros y un conductor, todos de nacionalidad lusa, se precipitó por un pequeño barranco en un tramo de bajada prolongada de la vía IC8 en el municipio de Serta (distrito de Castelo Branco).

Además de las víctimas mortales del accidente, uno de los más graves registrados en suelo luso, sufrieron heridas de diversa consideración casi todos los pasajeros del autocar, que iba de Portalegre a Santa María da Feira, en el norte del país.

Los fallecidos eran adultos con edades comprendidas entre los 50 y los 70 años y de los 21 heridos hospitalizados el domingo apenas uno ha recibido el alta, según medios estatales lusos, y varios tienen lesiones de gravedad.

Aunque los expertos todavía investigan las causas del siniestro, autoridades locales y miembros de los servicios de asistencia lo han relacionado ya, en declaraciones a los periodistas, con el peligroso trazado de la carretera, los efectos de la lluvia y la niebla y la falta de cinturones de seguridad en los asientos de los pasajeros.

Desde la compañía propietaria del autobús se ha destacado la peligrosidad del tramo en el que se produjo el percance y se ha subrayado que el vehículo reunía "todas las condiciones de seguridad".