Buenos Aires, 26 dic.- Tras 12 días de altas temperaturas y cortes eléctricos prolongados, el Gobierno argentino prometió hoy compensaciones a los usuarios que sufrieron fallos en el servicio y anunció sanciones para las compañías distribuidoras de energía.
En declaraciones a una televisión local, el ministro argentino de Planificación Federal, Julio De Vido, aseguró que los ciudadanos afectados por los cortes en el suministro eléctrico tendrán "una compensación económica", una cantidad que será mayor para los usuarios que hayan vivido la misma situación anteriormente.
De Vido hizo hincapié en que los contratos de concesión del servicio "no prevén ningún corte" y prometió que, una vez terminada la ola de calor, se realizará "una liquidación de las infracciones cometidas" por todas las compañías distribuidoras de electricidad.
En la capital argentina y el cinturón urbano bonaerense se registraron récords históricos de demanda energética, el último, el pasado lunes, con un pico de 23.793 megavatios de potencia en el conjunto de los generadores de todo el país, según datos del Ministerio de Planificación Federal.
Tras 12 días de altas temperaturas, vecinos de la ciudad de Buenos Aires y su cinturón urbano siguen sufriendo prolongados cortes de energía, que ni las autoridades ni las eléctricas que operan en la zona acaban de resolver.
El portavoz de Edenor, una de las compañías responsables del suministro eléctrico, Alberto Lippi, aseguró hoy que los empleados están "dando una rápida respuesta" al trabajar "sin francos (días libres) con turnos extendidos desde el 2 de diciembre".
"La empresa está trabajando en situación de emergencia desde el 2 de diciembre, antes de la ola de calor, debido a que ese día se produjo un temporal muy grande que destruyó más de 300 kilómetros de la red eléctrica de Edenor en La Matanza (en el oeste del país), explicó Lippi en declaraciones a una televisión local.
La zona central de Argentina, incluida Buenos Aires, vive el diciembre más caluroso en los últimos 43 años y desde hace tres días rige una alerta roja por las elevadas temperaturas.
La sensación térmica superó hoy los 46 grados y, en la localidad bonaerense de Morón el calor incluso levantó el asfalto de algunas calles.
En la ciudad santafesina de Rosario, a unos 400 kilómetros de Buenos Aires, las altas temperaturas también causaron la aparición en el río Paraná de las palometas, peces parientes de las pirañas, que atacaron a los bañistas y dejaron unos 70 heridos.
Según el Servicio Meteorológico Nacional, las lluvias llegarían a Buenos Aires esta noche y traerían un corto alivio, ya que la ola de calor se mantendría hasta el próximo 2 de enero.
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