El director de los Servicios Territoriales de Agricultura, Ferran Grau, y el delegado del Govern en las Terres de l'Ebre, Xavier Pallarès, han visitado este lunes por la mañana Batea y Caseres, los municipios más afectados por la granizada, y han recomendado recolectar las zonas afectadas lo antes posible.
Desde el Servicio de Sanidad Vegetal de la Conselleria de Agricultura de la Generalitat se ha enviado un aviso fitosanitario con las recomendaciones a seguir según el cultivo afectado, y se ha recordado a los municipios afectados hacer un seguimiento de los daños ocasionados.
La conselleria encabezada por Meritxell Serret también espera que el Ministerio de Agricultura publique lo antes posible la Orden de reducción de módulos del IRPF ajustada a los daños reales de los cultivos.
LLEIDA TAMBIÉN SUFRE LOS EFECTOS DEL GRANIZO
La misma tormenta de la madrugada del sábado también ha dejado casi 400 hectáreas de cultivos destrozados en la provincia de Lleida, siendo las comarcas del Segrià, Garrigues, Noguera, Pallars Jussà y Urgell las más afectadas.
En esta provincia los cultivos que sufrieron los estragos del granizo fueron los de fruta de semilla (225 ha), la viña (10 ha), el olivo (100 ha) y el almendro (50 ha), según la Generalitat.
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