Hacienda limita a una reunión esprés la negociación del ajuste con los sindicatos

  • La reunión que celebra el Ministerio con los sindicatos de los funcionarios apenas durará una hora, según denuncian los representantes de los trabajadores. Ésta ha arrancado a las cinco para los empleados de la Función Pública. El motivo es que a las seis habrá otra con los miembros de la Administración General.

Ruth Ugalde

“¿Qué quieren negociar, si no va a dar tiempo?”, se preguntan desde la Federación de Servicios a la Ciudadanía (FSC) de CCOO. El motivo es que la reunión que ha concertado con ellos el Ministerio de Hacienda para esta tarde apenas va a durar una hora.

O menos, porque este encuentro está convocado para las cinco de la tarde y a la seis la cartera dirigida por Cristobal Montoro tiene previsto otro encuentro con los trabajadores de la Administración General.

Las dos reuniones han sido organizadas, en teoría, para explicar a los trabajadores del sector público los motivos del duro ajuste anunciado esta mañana por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

La primera incluye al grueso de los trabajadores, incluidos los trabajadores de Educación y Sanidad, los dos gruesos de los empleados públicos que, además, están en el epicentro de los recortes. La segunda se ciñe, fundamentalmente, a la fuerza laboral de los Ministerios.

Desde Hacienda han venido defendiendo en los últimos tiempos que no quieren aprobar los recortes por decreto, sino que su objetivo es negociarlos con los trabajadores y poder modificar, con el mayor consenso posible, la reforma de la Función Pública.

Ésta va dirigida a “asimilar las condiciones de los empleados del sector público a la de los empleados del sector privado”, según señalan desde el Ministerio. Sin embargo, los sindicatos desconfían, sobre todo, después de conocer el poco tiempo que van a tener para debatir los recortes.

Mayor movilidad geográfica y funcional, reducción del número de liberados sindicales, pérdida de la extra de Navidad, mayor número de horas de trabajo e implantación de criterios de productividad para cobrar el variable y los complementos son los principales ajustes que sufrirán los funcionarios.

Ellos irán acompañados de una importante salida de trabajadores públicos, que suman algo más de un millón de personas.

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