Campaña 2021

Ojo con las multas: ¿hasta cuándo se puede hacer la declaración de la Renta?

Si el contribuyente se percata del retraso en la presentación del IRPF antes que la Agencia Tributaria, la cuantía de la multa será menor.

Billetes de euro.
Billetes de euro.
Imagen de Freepik.

Hace ya más de un mes que la Campaña de la Renta 2021 dio el pistoletazo de salida. Desde el pasado 6 de abril, todos los contribuyentes deben rendir cuentas con Hacienda. Algo obligatorio, siempre teniendo en cuenta que se cumplen los requisitos en cuanto a límites de ingresos de uno o de dos pagadores, y que se debe de hacer en el calendario estipulado. De lo contrario, la Agencia Tributaria lo detectará como una infracción, que se saldará con una multa económica.

Aunque hablamos de un trámite anual, no resulta una novedad que el borrador presente ciertos quebraderos de cabeza a los interesados. Son muchos los que tienden a retrasarse, por la dificultad del proceso, sobre todo cuando entran dentro una serie de variables como herencias, alquiler, hipotecas, otros ingresos, varios pagadores y un largo etcétera. Eso sí, es necesario estar atento a la Renta, pues si se demora demasiado puede ocurrir que el contribuyente se le pasen los plazos. 

Es normal, pues, preguntarse hasta cuándo se puede hacer la declaración de la Renta 2021. Aunque la fecha de comienzo siempre suele variar uno o dos días, el día límite es cada año el mismo: 30 de junio. 

Qué pasa si no se presenta

Si la persona en cuestión está obligada a presentarla y no se encuentra entre los supuestos anteriores, podrá recibir una multa o sanción por parte de la Agencia Tributaria. Además, el usuario tendrá que adjuntar esta renta no entregada y si cumpliera más de un año tendrá que pagar los intereses de demora. La multa asociada depende de quién se dé cuenta del error y el tiempo que haya transcurrido desde la finalización del periodo.

Suele ser habitual que algunas personas presenten el IRPF fuera de plazo. Cuando han pasado pocos días no suele haber multa aunque, según lo establecido, podría implicar sanciones menores.

Contribuyente

Si el contribuyente se percata del retraso en la presentación del IRPF antes que la Agencia Tributaria, la cuantía de la multa será menor. En este caso, si el resultado de la misma es a devolver o cero tendrá que hacer frente a una multa de 100 euros, que puede reducirse a 75 euros si se paga en plazo y sin recurrir.

En cambio, si la renta sale a pagar, el usuario tendrá que enfrentarse a un porcentaje de recargo adicional. Este puede ir subiendo del 5 al 20% cuanto más tiempo se tarde en entregar. Igualmente, existe una reducción del 25% si se paga en el periodo voluntario mínimo de cinco días.

Hacienda

¿Qué sanción supone que la Agencia Tributaria reclame la omisión de la declaración? En este caso, como se mencionaba anteriormente, las consecuencias serán superiores, aunque dependiendo del resultado de la misma.

Cuando es cero o a devolver, la multa asciende a 200 euros, pero puede verse reducida 50 euros por pagar en plazo y no recurrir. Sin embargo, si el resultado de la renta salió a pagar, las sanciones serán superiores. En primer lugar, y como en el supuesto anterior, el contribuyente tendrá que presentar el IRPF ingresando la cuantía que le corresponda.

Además, sobre esta misma Hacienda aplicará una multa de entre 50 y 150% sobre la deuda. Dicha sanción dependerá del perjuicio al erario público, la gravedad del ocultamiento y si hay casos previos de infracción.

La Agencia Tributaria tiene hasta cuatro años para revisar las declaraciones de la renta de los usuarios en cualquiera de esos periodos, por tanto, hay que tener en cuenta que esta omisión de entrega podría llegar a afectar a años anteriores.

Mostrar comentarios