El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, defiende que en el actual contexto aprobar subidas salariales equilibradas es recomendable, pero ha desaconsejado apostar por aumentos de sueldo "excesivos". "Si bien incrementos excesivos y generalizados de los salarios serían contraproducentes, aumentos consistentes con la evolución de la productividad y la demanda de las empresas a nivel individual son claramente deseables", alega Hernández de Cos en un artículo sobre la inflación para el informe económico de Esade publicado este miércoles.
El gobernador explica que una "evolución equilibrada de los salarios en línea" con estos factores ayudaría al país a "alcanzar el objetivo de inflación en el medio plazo de manera duradera" y, al mismo tiempo, permitiría "evitar la aparición de efectos de segunda vuelta indeseados". También reconoce que el grado de preocupación en torno a las tensiones inflacionistas en Europa "ha ido en aumento entre los responsables de política económica" y las perspectivas "apuntan al alza, especialmente a corto plazo".
En su opinión, si la subida de los costes se prolonga también aumenta el riesgo de que éstos se incorporen a los precios finales que paga el consumidor y, por ende, a los salarios, lo que daría lugar a una espiral inflacionista. No obstante, Hernández de Cos señala que de momento "no se están observando indicios claros de que ello esté ocurriendo en una escala apreciable" y recalca que evitar esta retroalimentación "está en manos de los agentes económicos" de cada país.
El gobernador incide en que las altas tasas de inflación se deben sobre todo a "factores específicos en su mayoría ligados a la pandemia", cuya incidencia a priori se espera que disminuya a lo largo de 2022 para situarse en el entorno del 2 % en 2023 y 2024, considerado un nivel idóneo. Además, para atenuar estas presiones inflacionistas insta a evitar un "impulso fiscal generalizado" y aboga por dar "apoyos selectivos", con la idea a medio plazo de que la "consolidación presupuestaria pase a un plano prioritario una vez asentada la recuperación".
Sobre la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE), el gobernador dice que se reducirá de forma "escalonada" el ritmo de compra de activos en los próximos trimestres y se pondrá fin a las compras netas en el marco del programa de compras de emergencia frente a la pandemia (PEPP) a final de marzo.
Antes de aprobar una subida de tipos de interés, Hernández de Cos insiste en que se tienen que dar varias condiciones para que se tome la decisión, aunque reconoce que dada la "elevada incertidumbre" es necesario "mantener más que nunca la flexibilidad y las opciones abiertas en el manejo de la política monetaria", por lo que el Consejo de Gobierno del BCE -del que forma parte- "está preparado para ajustar todos sus instrumentos según proceda". Existe "la necesidad de mantener el gradualismo, la dirección está clara pero no hay que precipitar conclusiones sobre su calendario. Será gradual y dependiente de los datos", sentencia.
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