Ibercaja asume posición de fuerza y plantea nuevas condiciones a Liberbank

Zaragoza, 9 oct.- La dirección de Ibercaja forzará una nueva negociación con Liberbank para asumir una posición de predominio en el proyecto de operación de fusión entre las dos entidades y Caja3.

Según han informado hoy a Efe fuentes de Ibercaja, la decisión fue adoptada ayer por el consejo de administración de la entidad aragonesa, reunido para valorar los datos de los test de estrés a la banca española hechos por la consultora Oliver Wyman y dados a conocer el pasado 28 de septiembre.

Esta auditoría puso de manifiesto que en el escenario económico más adverso, Ibercaja necesitaría unas provisiones de capital de 226 millones de euros, que podría cubrir sin necesidad de acudir al rescate, mientras que Caja3 debería incrementar su capital en 779 millones y Liberbank en 1.198 millones.

Las fuentes citadas han explicado que estos datos han animado a la entidad a plantear nuevas condiciones de cara a una posible operación de fusión, que pasarían por asumir el protagonismo de las negociaciones.

Los miembros del consejo de administración, han explicado estas fuentes, plantearon exigir que Ibercaja asuma la mayoría de la nueva sociedad y se encargue de la dirección de la entidad.

También consideraron necesario el establecimiento de la sede central del nuevo banco en Zaragoza, al entender que su traslado a Madrid sería algo negativo para los intereses de la entidad.

Para las fuentes referidas, existe la firme convicción entre los responsables de Ibercaja de que la fuerza de la entidad radica en su origen aragonés, por lo que su traslado administrativo a Madrid sería, en su opinión, negativo para sus intereses.

Otras fuentes financieras han admitido, en declaraciones a Efe, que la posición de fuerza de Ibercaja respecto a Liberbank en los escenarios económicos planteados ha modificado las reglas de negociación, unas reglas que la caja aragonesa "nunca asumió con convencimiento", sino como consecuencia de lo que consideraban una "imposición externa".

El propio presidente de Ibercaja, Amado Franco, poco antes de iniciarse la negociación con Liberbank, dio por hecho públicamente que los planes de fusión se cerraban con Caja3 ya que, según sus propias palabras, "el tamaño no importaba".

Además, consideran que la buena relación existente entre la presidencia de la entidad y el Gobierno aragonés facilitaría que la administración regional viera con buenos ojos estas nuevas negociaciones.

Este nuevo escenario para las negociaciones se deriva de los resultados de las pruebas de estrés, que revelan que la mayor salud financiera corresponde a Ibercaja, que tendría las menores necesidades de capital de las entidades que se encuentran en proyecto de fusión.

El grupo, denominado provisionalmente Libercaja, tiene un superávit de capital en el escenario base de 492 millones de euros, de los que 389 corresponden a Ibercaja y 103 a Liberbank, mientras que Caja3 tiene un saldo negativo de 188 millones.