Iglesias y Colau cierran filas con Sánchez para 'vender' los PGE a los soberanistas

  • Recuerdan a las fuerzas nacionalistas catalanas que estas son las cuentas más de izquierdas de la última década. 
Iglesias y Colau en Barcelona
Iglesias y Colau en Barcelona
efe

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el líder de Unidos Podemos, Pablo Iglesias, son ya algo más que socios del Gobierno a la hora de introducir medidas en los Presupuestos que prepara el Gobierno para el año que viene. Este domingo se han convertido en los verdaderos arietes del presidente Sánchez para convencer a los partidos independentistas catalanes de que apoyen las cuentas socialistas, con la advertencia de que lo contrario seria la vuelta a las políticas "represivas" del PP. 

Colau, el secretario general de Podemos y la presidenta de los comunes en el Parlament, Jéssica Albiach, entre otros, han celebrado este domingo en en Barcelona el acto "Ahora es posible" para explicar el impacto de los Presupuestos Generales del Estado a las bases de partidos como ERC y el PDeCAT. Desde las filas del partido morado han recordado a los soberanistas que las clases trabajadoras y populares no se merecen pagar los platos rotos de la judicialización de la política: "La gente trabajadora no tiene la culpa de la represión del PP".

Pablo Iglesias, por su parte, ha admitido que el Gobierno del PSOE no es lo mejor, pero sí puede posibilitar aprobar en España las cuentas más de izquierdas que se conocen en las últimas décadas, para lo que ha pedido al apoyo de las fuerzas nacionalistas catalanas. A su entender, tener unas cuentas propias permitiría, además, dejar de gobernar a base de decretos e iniciar un proceso en el Congreso con más negociación para todas las iniciativas sociales y económicas que se quieran poner en marcha. 

De esta forma, los dos líderes de la izquierda en Madrid y Cataluña quieren dejar patente que una cosa son las cuentas del Estado, en las que su influencia es clara, y otra muy distinta el proceso judicial a los responsables del procés. Ante un público netamente soberanista, han evaluado el impacto que tendría para los ciudadanos la aprobación de los Presupuestos. Colau ha insistido en que los partidos independentistas deben ofrecer unas cuentas sociales para revertir los recortes, y ha subrayado que los servicios públicos catalanes y municipales "están al límite" y necesitan la aportación estatal.

La alcaldesa de Barcelona ha garantizado a ERC y PDeCAT que siempre "nos tendrán a su lado para denunciar represión, pero ellos también deben estar al lado de la gente trabajadora que no tiene la culpa de la represión del PP", para recordarles después que las cuentas que plantea Sánchez son socialmente históricas y servirán para revertir las políticas austeridad del PP, ya que afrontan problemas de los trabajadores como el acceso a la vivienda.

Colau se ha referido incluso directamente a Sánchez , con al petición de que "no tire la toalla" en la negociación de los Presupuestos, y le ha advertido que están en jugo las libertades y derechos de millones de personas, y ha instado al PSOE a seguir peleando y no dar por perdida la aprobación de los PGE. 

Calviño descarta cambiar presos por Presupuestos

El acto se produce después de que esta misma semana el Gobierno haya confirmado que su intención es presentar las cuentas del Estado en el Congreso de los Diputados en la primera semana del mes de diciembre, para que se inicie su tramitación. La propia ministra de Economía, Nadia Calviño, aseguraba este domingo en una entrevista que la decisión de la Abogacía del Estado de no incluir la rebelión entre los delitos imputados a los políticos del procés no tiene nada que ver con la negociación presupuestaria que aborda el Gobierno socialista.

Calviño ha descartado así considerar este cambio en la calificación inicial de gesto hacia los independentistas de cara a la aprobación de las cuentas públicas de 2019, y ha insistido en que no le parece bien "mezclar cuestiones presupuestarias con otras que no tienen nada que ver". La ministra ha confirmado que el Ejecutivo calcula poder presentar los Presupuestos en el Congreso en diciembre, momento en que "se verá qué opciones hay o qué decisiones hay que tomar".

El propio presidente del Gobierno ya ha admitido que su intención es agotar la legislatura y no convocar elecciones hasta el año 2020, aunque para ello tenga que prorrogar los Presupuestos. 

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