España y Francia pactan cambiar el calendario y esperan un acuerdo del sector

  • Santoña, 6 mar (EFE).- Los gobiernos de Francia y España han acordado hoy, en Santoña, solicitar a la Comisión Europea la modificación del calendario de cuotas para la pesquería de la anchoa, a la espera de que las flotas de ambos países lleguen a un acuerdo sobre cómo se van a repartir los cupos de esta especie.

Santoña, 6 mar (EFE).- Los gobiernos de Francia y España han acordado hoy, en Santoña, solicitar a la Comisión Europea la modificación del calendario de cuotas para la pesquería de la anchoa, a la espera de que las flotas de ambos países lleguen a un acuerdo sobre cómo se van a repartir los cupos de esta especie.

Tras una reunión de casi siete horas entre técnicos de los gobiernos español y francés, científicos y pescadores, los directores generales de ambos países, Sylvie Alexandre y Fernando Curcio, han explicado a los periodistas que trasladarán a la CE la propuesta de que el calendario de cuotas máximas de pesca de anchoa se fije en junio, para iniciar la campaña en julio.

Así, según Curcio, la pesca comenzará en base a los estudios que los científicos elaboran en primavera sobre las reservas de anchoa que hay en el Golfo de Vizcaya.

Este cambio del calendario para determinar las cuotas, que ahora se acuerda en diciembre, tendrá que incluirse en una modificación del reglamento comunitario que recoge esta materia y que tiene que aprobar la Comisión Europea y el Consejo de Ministros de Pesca de la UE.

Pero Curcio ha reconocido que aún hoy se desconoce qué va a ocurrir en junio con la pesquería, si se va a derogar la veda o se va a mantener la prohibición de pescar anchoa, ya que aún se esperan los informes científicos que indiquen cuál es la reserva de bocarte.

Desde hace cuatro años, la pesca de la anchoa en el Golfo de Vizcaya está prohibida, aunque los profesionales del sector, tanto franceses como españoles, han abogado en Santoña por abrir el caladero, pero este asunto no ha sido finalmente aclarado después de varias horas de reunión.

De hecho, el presidente de la Cofradía de Pescadores de Vizcaya, Iñaki Zabaleta, ha afirmado, al acabar el encuentro, que en relación a lo que va a ocurrir con la veda no ha habido "ni perro ni gato" y ha opinado que al final serán los políticos "los que decidirán".

Zabaleta ha insistido en que no existe acuerdo con los pescadores franceses sobre el cupo de cada flota, porque piden "muchísimo más" de lo que se les puede dar, aunque ha señalado que los barcos del Cantábrico coinciden en que la pesquería hay que abrirla, después de cuatro años, aunque sea con una cuota reducida, que ha fijado en 7.000 toneladas.

Los científicos encargados de analizar la situación de la pesquería han asegurado que se podría fijar, a partir de junio, una cuota máxima de pesca (TAC) "reducida" en el caladero, aunque las reservas de la especie no lleguen al nivel de biomasa de precaución (33.000 toneladas).

Pero, han insistido, en que hay que esperar a lo que indiquen los informes que se van a elaborar en primavera para conocer cómo está la reserva de esta especie, que en junio del año pasado se situaba en 24.000 toneladas.

El director del instituto vasco de investigación marina (AZTI), Andrés Uriarte, ha señalado que esta biomasa "es baja" y ha añadido que otros estudios, elaborados en octubre, señalan que la situación no ha mejorado mucho y que no se puede ser "muy optimista".

Y, además, ha indicado que nunca se podrá bajar de una reserva mínima de 21.000 toneladas, que pondría en peligro la especie.

Curcio ha confiado en volver en una próxima ocasión a Santoña con "mejores resultados", aunque que no se ha fijado una próxima reunión de los presentes hoy en Santoña, entre los que se encontraba la jefe de la Unidad de Control de Pesquerías del Atlántico de la Comisión Europea, María Fuensanta Candela Castillo.

Y sobre los acuerdos entre flotas, el director de Recursos Pesqueros y Acuicultura del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino ha insistido en que se ve un "atisbo" de acuerdo, que los pescadores han negado durante toda la reunión.

Además, el acuerdo parecía no existir tampoco entre los propios pescadores del Cantábrico, ya que tras un primer receso de la reunión, Zabaleta ha señalado que la flota española iba a solicitar la apertura del caladero, mientras que el máximo representante de los pescadores cántabros, Manuel Vinatea, ha indicado que podía continuar cerrado hasta enero.

Preguntado por esta discrepancia de opiniones, Zabaleta ha dicho que a Vinatea se le habrá "encendido la bombilla", porque ha asegurado que toda la flota española (Cantabria, País Vasco, Asturias y Galicia) ha quedado de acuerdo en pedir que se abra el caladero después de cuatro años.

Curcio ha insistido en que las flotas francesa y española deben llegar a un acuerdo para fijar una explotación "racional, satisfactoria y duradera" de la anchoa en el Golfo de Vizcaya, aunque respecto al reparto (90 por ciento para España y 10 para Francia) ha recordado que es un "principio inalterable".

Pero, ha señalado que el Ministerio "no tendría inconveniente" en dar el visto bueno a que los pescadores galos tengan un número mayor de capturas, si existe un acuerdo con los españoles.

Mostrar comentarios