La inflación escala en Francia al 6,2% y da más razones al BCE para subir tipos

Al igual que ha sucedido en el caso español, la energía y los alimentos han presionado al alza la inflación en Francia en febrero. La tasa anual de IPC en la segunda economía de la Eurozona por tamaño ha escalado hasta el 6,2%, dos décimas por encima de como cerró enero y recupera niveles de noviembre del año pasado, cuando la subida de los precios en el país vecino alcanzó niveles que no se veían desde la década de los 80. El repunte del IPC en dos de las cuatro mayores economías del euro da más argumentos al Banco Central Europeo (BCE) para seguir adelante con las subidas de tipos.

La lectura preliminar del IPC publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Estudios Económicos (Insee, por sus siglas en francés) confirma que la inflación armonizada en Francia, dato que Eurostat toma como referencia para hacer sus comparativas entre países, se habría elevado en febrero hasta el 7,2% desde el 7% de enero, alcanzando así su nivel más alto desde la creación del euro.

Las mayores tensiones inflacionistas responden a un mayor encarecimiento de los alimentos, que se habrían elevado un 14,5% de media en relación al mismo mes de hace un año (venían de subir en enero al 13,3%) debido, principalmente, a la mayor presión de los productos elaborados, que suben un 14,6%, esto es, cuatro décimas por encima de lo que se encarecen los alimentos frescos. 

Esas presiones responden, también, a un alza de la energía que solo se moderó al 14% (desde el 16,3% del mes anterior). En ese caso es determinante, como en el español, que la comparativa se hace con un mes de febrero del año pasado en el que todavía no se apreciaba el impacto tan severo que la guerra en Ucrania ha tenido sobre esta rúbrica, dado que la invasión tuvo lugar en los últimos días del mes. 

El dato definitivo, solo un día antes de la reunión del BCE

"Los precios de la energía deberían ralentizarse, mitigándose la revalorización de las tarifas eléctricas reguladas por el efecto de la caída del precio de los productos petrolíferos", señala en su nota de prensa el Insee. El Instituto de Estadística galo apunta, además, a un incremento del coste de los servicios del 2,9% interanual, tres décimas más de la subida que habían registrado en enero. Por otra parte, los productos manufacturados se encarecieron un 4,6%, una décima más que a principios de año con el final de las rebajas de invierno.

El organismo francés hará público el dato definitivo de inflación de febrero el próximo 15 de marzo, solo un día antes de que el Consejo de Gobierno del BCE se reúna para dar a conocer su decisión sobre los tipos de interés (se prevé que el emisor sitúe la tasa oficial en el 3,5% tras subirla en otros 50 puntos básicos) y de que haga públicas, además, sus nuevas previsiones económicas para la región.