Sin fecha para la normalidad

El virus frena la inversión extranjera: "Sin tocar el ladrillo no compran"

La pandemia de la Covid-19 no terminó en junio con el fin del primer estado de alarma. España ya va por el segundo y los extranjeros han puesto pausa a sus decisiones de compra hasta poder pisar el territorio.  

Vivienda compraventa casas
El virus frena la inversión extranjera: "Sin tocar ladrillo no compran".
EFE

Las restricciones por la Covid-19 y la falta de 'normalidad' han afectado especialmente a la inversión extranjera en el mercado inmobiliario, ya que todo el que busca comprar una casa "necesita tocar el ladrillo", según los expertos del sector, y los números lo demuestran. El Colegio de Registradores ha apuntado que la venta de casas a este grupo sufrió un desplome del 50% con respecto al año pasado durante el segundo trimestre, una tendencia cuyo cambio dependerá en gran parte del comportamiento impredecible del virus. 

Esta 'fuga' de inversión extranjera se ha notado especialmente en localidades acostumbradas a recibir una gran afluencia de turistas durante el año, como Canarias. Vanesa Rubio, presidenta de la Asociación Canaria de Empresas de Gestión Inmobiliaria (ACEGI), ha compartido con este medio que "si paseas por zonas del sur como Adeje o Arona, que son de los municipio con más transacciones inmobiliarias de extranjeros en toda España, ves que todo está muerto. Nosotros no estamos notando un aumento de operaciones ni de interés en el sector". El paso de la pandemia ha traído muchos cambios a las islas. La profesional señala que "aquí hubo un boom del alquiler vacacional hace unos años, pero un gran número de propietarios ha decidido dar el salto de nuevo a los alquileres tradicionales ante la baja rentabilidad que está generando el modelo por la falta de turistas. Además, se puede observar cómo muchas villas lujosas han bajado los precios". 

Para la directiva de ACEGI, "la crisis es global y los clientes nacionales no serán suficientes para cubrir el 'hueco' que han dejado los extranjeros". El Colegio de Registradores apunta que el peso de la inversión de los foráneos es distinto en las autonomías. Los extranjeros firmaron el mayor número de transacciones sobre el total en Baleares durante el segundo trimestre, con un 24,63%, un porcentaje inferior al 32,44% registrado en los primeros tres meses del año. Canarias, que ocupa el segundo lugar en cuanto al peso extranjero en el sector, se ha desmarcado de la tendencia al pasar de un 20,06% al 24,54% de operaciones de foráneas sobre el total tras los primeros tres meses del año. La  Comunidad Valenciana ocupa la tercera posición con un 21,70%, que también implica un descenso trimestral frente al 25,14% del primer trimestre. La región de Murcia se ha mantenido en cuarto lugar al bajar el porcentaje del 19,14% al 17,65% en el mismo periodo, seguida de Cataluña con un 11,10%, un dato inferior al 12,97% del inicio del año.

Ninguna región se escapa de la sangría. Christophe Chevallier, director de la oficina de la inmobiliaria Barnes Madrid, asegura que "la demanda actual es menor a la oferta. Hay mucha oferta tanto a nivel de alquiler como de venta y el mercado está en una especie de pausa. Muchos compradores foráneos esperan que los precios bajen más a final del año mientras los vendedores tratan de resistir. Hemos visto a ingleses y americanos con presupuestos millonarios enviar amigos o familiares a visitar propiedades y hacer reservas desde que acabó el primer estado de alarma, pero los propietarios igual quieren venir para tomar la decisión final". El experto ha matizado a este medio que los fondos o empresas de inversión de fuera sí han generado más ventas después de junio ya que suelen basar sus decisiones en criterios de rentabilidad -"y a veces basta con un tour virtual" -para tomar sus decisiones, pero los números todavía no son los de la era pre-Covid.

El experto también ha detectado un aumento del poder negociador en las transacciones que involucran a propietarios individuales, que "ha alargado los procesos. Las personas que ofertan pisos de lujo de más de un millón de euros tienen una base financiera sólida y prefieren hacer tiempo antes que rebajar los precios, pese a las ofertas que algunos extranjeros lanzan; pero los propietarios pequeños que tienen necesidad de vender han llegado a rebajar su oferta hasta un 20%". Los extranjeros, según el experto, están atentos a estos movimientos, pero no hay mucha actividad por la incertidumbre: "Ahora todos miran lo que hace el mercado". 

Raisa Venermo, socia fundadora de AvaLanding, una empresa especializada en asesoría para inversores extranjeros durante su aterrizaje en España, también ha identificado este freno en el mercado. La experta señala que los compradores "quieren ver y tocar el producto y las restricciones de viaje hacen esto imposible para muchos. No damos por perdidas las ventas que no se han podido realizar hasta ahora porque el interés por la oferta en el territorio sigue existiendo". Venermo destaca además que el parón en la actividad por parte de fondos de inversión foráneos ha sido menor, pero admite que la vuelta a la normalidad es imprescindible para la salud del mercado ya que solo dos o tres personas, entre las 500 operaciones gestionadas en los últimos años, han llevado a cabo una compra sin ver el inmueble de forma presencial. 

Los británicos encabezan el ranking de nacionalidades que más compran en el país con el 12,3% de las compras totales de extranjeros, seguidos de alemanes (7,2%), rumanos (6,9%), franceses (6,7%), marroquíes (6,4%) y belgas (5,8%). Raisa Venermo, de AvaLanding, ha señalado que para 'cuidar' estos porcentajes es preciso que la situación sanitaria mejore, que se reabran todas las fronteras, y que se resuelva el colapso en la administración pública que impide la obtención de documentos como el NIE para que los extranjeros operen con normalidad en el territorio. La experta asegura que esta crisis no es como la del 2008 y España se recuperará por su el atractivo de su calidad de vida y seguridad: "Ahora que la gente puede teletrabajar va a vivir donde haya calidad de vida y buenas oportunidades de inversión. En España se encuentran y también ofrece una seguridad física que valoran mucho los inversores que vienen de situaciones donde hay fricciones como Hong Kong, Estados Unidos y algunos países árabes. España saldrá ganando". 

Mostrar comentarios