Inversores mantienen optimismo sobre la deuda soberana de México, dice S&P

México, 26 sep.- Los inversores internacionales son optimistas sobre los títulos de deuda soberana de México, que se intercambian en los mercados con un nivel más alto "como si la calificación fuera 'A' o 'A+'", indicó hoy la agencia de riesgos estadounidense Standard & Poor's (S&P).

En un informe divulgado hoy en México, la agencia recordó que la calificación de la deuda soberana de México se redujo en diciembre de 2009 de "BBB+" a "BBB" con perspectiva estable, nivel que se ha mantenido hasta ahora.

Precisó que desde entonces en los mercados se ha registrado una gran volatilidad debido a que los inversionistas desplazan sus capitales hacia instrumentos que no han sido contaminados por los problemas de Europa.

"Al final de la semana pasada, el 'spread' sobre los bonos a cinco años de México se situaba alrededor de 88 puntos base", lo que refleja el optimismo sobre la deuda soberana de este país, destacó la calificadora.

S&P indicó que la calificación de México refleja la solidez crediticia y sus expectativas, con una limitada flexibilidad fiscal y perspectivas de un crecimiento moderado en el mediano plazo.

"Sin embargo, hemos dicho durante mucho tiempo que si vemos un fortalecimiento de las perspectivas de mediano plazo sobre las finanzas públicas y el crecimiento, podríamos subir nuestras calificaciones de la deuda soberana de México", expuso.

Por este motivo, indicó que está a la espera de conocer las propuestas de políticas públicas de la próxima administración, y recordó que durante el Gobierno del presidente Felipe Calderón no hubo acciones concretas que mejoraran de manera significativa la dinámica del crecimiento.

Destacó la evolución de la economía mexicana con una caída del PIB de 6,5 % en 2009 debido a la crisis financiera global, hasta el crecimiento de 4 % el año pasado pese a la incertidumbre mundial, el cual calificó de moderado "para los estándares de los mercados emergentes".

Señaló que aunque se desconoce con qué rapidez la próxima administración, que entrará en funciones el 1 de diciembre, logrará o no negociar con los diferentes partidos un avance de las reformas sustantivas, al parecer los inversionistas se mantienen optimistas.